Este lunes trascendió que la ex presidenta del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia, Karime Macías Tubilla, esposa del ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, podría ser traída a México, luego de que las autoridades liberaran una orden de aprehensión en su contra.

En ese contexto, circularon versiones en el sentido de que la Procuraduría General de la República, PGR, realizó una investigación en coordinación con el Servicio de Administración Tributaria; y que producto de esas indagatorias se determinó llevar ante la justicia a Macías Tubilla.

Se trata de una especie que no se ha confirmado todavía. Lo cierto es que la ex presidenta del DIF estatal, señalada por haber participado o al menos por beneficiarse del saqueo de los recursos públicos veracruzanos, es investigada por la autoridad desde hace meses; y ha sido acusada por enriquecimiento ilícito y defraudación fiscal.

Sus cuentas bancarias fueron congeladas por la PGR, que adoptó la misma medida en el caso de la madre, hermanos, suegros y en general una gran parte de la parentela de Duarte de Ochoa.

Desde 2016, la PGR emitió un oficio a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), en el que solicita que las cuentas de Karime Macías fueran aseguradas, por estar sujetas a investigación.

En su momento, se habló de “indicios fundados y suficientes que hacen presumir que el numerario que se encuentra en dichas cuentas bancarias fue obtenido con las ganancias derivadas de la comisión de algún delito”, como lo consignó el diario Reforma.

En total, la PGR habría ordenado que la CNBV congelada 112 cuentas a nombre de Karime Macías y de otros miembros de la familia Duarte de Ochoa y Macías Tubilla.

El pasado 6 de agosto, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares retomó el caso e informó que acudió a la PGR para presentar pruebas sobre la red de cómplices de Javier Duarte, en la que se encontraba la esposa del ex gobernador, al igual que otros ocho miembros de esa familia.

Posterior a ello, los últimos días de agosto trascendió que la PGR llamaría a cuentas a la ex presidenta del DIF veracruzano, al igual que a una decena de familiares y colaboradores cercanos.

En el pasado han quedado los días en que la pareja Duarte-Macías despilfarraba en trivialidades el dinero público.

En el anecdotario y como mal ejemplo quedó la pareja que gobernó Veracruz desde finales de 2010 hasta el tercer trimestre de 2016.

El “sí merezco abundancia”, que consignó la famosa libreta de Karime que fue incautada en una de sus propiedades, revelaba a la perfección la naturaleza de una presidenta del DIF que era muy conocida por sus excesos, como el gasto, sólo en 2011, de más de 8 millones de pesos en ropa, artículos de lujo y hoteles.

Hoy, la realidad de la pareja Duarte-Karime está muy lejos de aquellos días en los que se gobernaba por capricho y se saqueaban los recursos públicos hasta el exceso; el ex gobernador se encuentra preso en el Reclusorio Norte; y su todavía esposa, investigada, con las cuentas bancarias congeladas, y con un proceso judicial abierto, que le podría convertir en la próxima interna del penal de Santa Martha Acatitla, donde han estado o están mujeres tan célebres como Juana Barraza, “La Mataviejitas”; Sandra Ávila Beltrán, “La Reina del Pacífico”; y tal vez la más famosa, Elba Esther Gordillo Morales, ex lideresa del poderoso sindicato magisterial.

Probablemente, luego de la captura de Javier Duarte de Ochoa, el personaje a quien más veracruzanos quieren ver encarcelado es esta señora; de confirmarse las versiones que apuntan a la liberación de una orden de aprehensión de la PGR, estaríamos muy cerca de verla tras barandilla. @luisromero85