Prefacio.
El senador Héctor Yunes Landa pasó la pelota, con elegancia, al campo del gobernador de Veracruz. No objetó los mecanismos elegidos por la actual administración estatal para renegociar la deuda pública. Lo que hizo fue presentar un Punto de Acuerdo ante el Senado de la República para que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) vigile ese proceso y garantice su transparencia y que se acompañe a la autoridad estatal en el desarrollo de la licitación pública. *** “Queremos asegurarnos que no se trata de un negocio personal como sucedió en el pasado”, explicó Yunes Landa. El que nada debe, nada teme y con seguridad el gobernador de Veracruz no tendrá objeción en que la Hacienda federal vigile un procedimiento que debe estar libre de cualquier sospecha. *** Yunes Landa parte de la premisa de que la deuda debe servir para reactivar la economía y no para comprar votos, por lo que recordó que la Secretaría de Hacienda tiene facultades que le confiere la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios para solicitar la información que le permita conocer las condiciones pactadas en la reestructuración de la deuda y asegurar que ésta se realice en el marco de la ley, con un costo financiero a favor de las finanzas del estado. *** No suena tan complicado. ¿Qué, señor gobernador? ¿Se anima, o es que algo oculta?
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Algo huele mal en el manejo de las finanzas de Veracruz. Algo luce opaco, cuando el gobernador, que ha demostrado “tener los pantalones bien puestos” para enfrentar (al menos ante las cámaras) a la delincuencia organizada; para tachar de “loco” (por decir lo menos) al dirigente nacional de Morena, y hasta para regañar a los reporteros que le preguntan “idioteces”, prefiera que sea uno de sus esbirros el que dé respuesta a los puntuales señalamientos del senador José Yunes Zorrilla, sobre la prevalencia de la “licuadora”.
En múltiples momentos ha demostrado el actual gobierno de Veracruz que carece, en forma absoluta, de autocrítica, que cuando se ve obligado a admitir una carencia, o un punto crítico, opta por la salida fácil de culpar a “los que estuvieron antes”.
Ese defecto parte desde el inicio de la actual administración, cuando el mandatario estatal pronunciaba su discurso luego de rendir protesta y advertía: “No olvido, no perdono; no habrá amnistía”.
Y en el mismo discurso anunciaba que había “conseguido”, incluso antes de tomar posesión, que varios de los cómplices de Javier Duarte regresaran parte de lo robado. Hoy, más de nueve meses después, aquellos que aceptaron el “vómito negro” siguen en libertad y la Fiscalía de Veracruz no los ha molestado.
No habría amnistía, ni perdón, ni olvido para los que sumieron en esta crisis a la entidad, pero este jueves el secretario de Salud, Irán Suárez Villa, admitía que el actual gobierno estatal “pactó” con empresas que incumplieron contratos en la administración de Javier Duarte y ahora se les premia con adjudicaciones directas, “porque bajaron sus costos”.
Algo huele mal en el manejo de las finanzas de Veracruz, cuando no hay registro alguno del destino que se le ha dado a los fondos recuperados, que habían sido hurtados por socios o colaboradores de Javier Duarte.
No hubo en ningún momento una solicitud formal a la Legislatura local para que aprobara el destino que decidió darle el gobernador a esos fondos, como lo establece la Constitución de Veracruz, en su Artículo 33, fracción XXVII, que plasma como una de las atribuciones del Poder Legislativo “fijar anualmente los gastos públicos y decretar las contribuciones con que deban ser cubiertos, con base en el presupuesto que el Ejecutivo presente”.
Algo huele mal en el manejo de las finanzas de Veracruz, cuando en lugar de explicar el origen, la fecha de radicación y el destino de los recursos federales, el secretario de Finanzas, Guillermo Moreno Chazzarini, emite una misiva dirigida al senador José Yunes Zorrilla, acusándolo de ser “cómplice” de los anteriores gobernadores y tachándolo (en agravio de su investidura) de “ignorante”.
Presume el lacayo del gobernador que tras nueve meses de gobierno no hay un solo señalamiento de corrupción. Paciencia, habrá que esperar a la revisión de la Cuenta Pública del 2017 para saber si en realidad han sido tan limpios y transparentes como hoy presumen.
Lo que sí está claro es que el señalamiento de Yunes Zorrilla causó escozor y provocó una sobrerreacción, más propia de bravucones que de servidores públicos, obligados a rendir cuenta a los veracruzanos y a sus representantes, como es el caso del senador.
Bien reza el dicho que “ahí donde chillan, ahí está el muerto”.
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Epílogo.
El gobernador de Veracruz está convencido de que “su palabra vale”, a pesar de las múltiples ocasiones en las que se le ha exhibido como embustero. El tiempo termina poniéndolo en su lugar. El domingo 20 de agosto, el mandatario estatal rechazó que por razones de inseguridad médicos que prestaban servicios en la clínica del IMSS en Papantla hayan abandonado dicha institución. “No hay ningún hospital que se haya quedado sin médicos o enfermeras por esa razón. No hay ningún médico que se haya ido; eso es falso, falso”, respondió. *** Este jueves, Antonio Benítez Lucho, delegado del IMSS zona norte, confirmó que ante la inseguridad que se ha registrado en Veracruz se determinó que en las zonas de mayor riesgo dejarán de laborar médicos pasantes y en el caso de los residentes, se determinó que en el Hospital rural de Papantla sean retirados de manera definitiva. “En el sentido de prevenir en aquellas zonas de riesgo para que no haya pasantes, en el tema de los residentes hay una decisión nacional de que aquellas residencias que no cumplan con la norma establecida pues no habrá residentes”. ¿Así o más claro? *** El senador José Yunes Zorrilla participó en el III Foro Internacional de Inclusión Financiera, encabezado por el presidente Enrique Peña Nieto y por el secretario de Hacienda, José Antonio Meade. Este Foro es un evento bianual organizado por la Secretaría de Hacienda con el objetivo de resaltar el compromiso de México para impulsar la inclusión financiera de todos los mexicanos. Al inaugurar el Foro, el presidente Enrique Peña Nieto anunció que en los próximos días se enviará al Congreso de la Unión una iniciativa para la regulación y el marco legal en la actuación de las empresas de tecnología financiera.