La presidenta de la Comisión Estatal para la Atención y Protección a Periodistas, Ana Laura Pérez Mendoza, dijo que el pasado sábado se reunieron con el gobernador Miguel Ángel Yunes, quien les externo su “preocupación” por los homicidios de Ricardo Monlui y Cándido Ríos.
Uta sí, preocupadísimo que debe estar el señor cuando se le olvidó dar el pésame a la familia del asesinado periodista Cándido Ríos.
Qué maravilla que el gobernador se “preocupe” pero más maravilloso será el día en que su gobierno se “ocupe” de proteger a quienes nos dedicamos a este oficio.
La titular de la CEAPP dijo que Yunes Linares se comprometió a “apretar” a la Fiscalía General del Estado para que se aclaren estos asesinatos y en lo personal, le creo a Ana Laura. A quien no se le cree es al gobernador.
En seis años y nueve meses han sido asesinados 21 periodistas en Veracruz además de que hay tres desaparecidos de los que de plano ya ni se habla. Y es la hora en que ni uno de esos crímenes ha sido aclarado. Ni uno solo.
¿Cómo creerle entonces al gobernador cuando dice que apretará a la Fiscalía si el joven fiscal Jorge Winckler ha mostrado una lamentable incapacidad para ejercer el cargo?
Lo cierto es que el gremio periodístico está cada día más inerme y miente quien diga lo contrario.
La semana anterior fue atacada a golpes y empellones la reportera Norma Cortés Molina en Martínez de la Torre. La agredió un guarura del alcalde Rolando Olivares Ahumada; frente a las narices de éste.
¿Y?
Pues que no pasó nada. Norma levantó su denuncia ante la Fiscalía, denuncia que (puedo apostarlo) fue echada a la basura apenas salió de esa dependencia. Igual que ha sucedido con las carpetas de investigación de los compañeros asesinados que “se perdieron” en la anterior administración, según dijo la misma presidenta de la CEAPP.
Ana Laura Pérez asegura que existe el compromiso de Yunes Linares de acabar con la impunidad que cobija a los asesinos de periodistas y yo insisto, le creo a mi compañera de oficio, pero me gustaría preguntarle si ella cree en las palabras del gobernador.
¿Cómo creer que se acabará la impunidad cuando Veracruz es uno de los estados donde más se practica? ¿Cómo creer que se acabará cuando al menos 21 asesinos andan sueltos por ahí mientras 21 cadáveres y sus familiares esperan justicia?
Lo dije en una ocasión y lo repito ahora: si no nos unimos nadie nos ayudará. Si no vemos por nosotros nadie lo hará.
No seamos ingenuos; al gobierno estatal y al gobernador le importan pura corneta los periodistas. El señor Yunes Linares anda en rollos más importantes y qué carambas va a perder en tiempo en atender a una bola sujetos mal pagados y peor comidos que lo único que hacen es joder con su pluma, su grabadora y su block de notas.
En Veracruz los periodistas tenemos dos caminos: jodernos o encomendarnos a Dios; hasta los que presumimos de ateos. Pero creer en que se nos brindará ayuda gubernamental para ejercer con seguridad nuestro oficio, es una utopía muy cruel.