Admiro la valentía de los periodistas al escribir las cosas como son y no como otros las han platicado, la pasión por siempre buscar la verdad y sin duda alguna, hoy, se ha convertido en uno de los trabajos más peligrosos, hemos visto morir a muchos compañeros por exponer la verdad e incomodar a funcionarios públicos, empresarios y al crimen organizado. Te matan por ejercer la profesión, es algo sumamente cobarde, muchos se han visto intimidados por estas acciones, pero algunos permanecen firmes, luchando contra marea.
Lamentablemente hay muchos ejemplos, a los cuales no les han hecho justicia, no han logrado detener a los asesinos, para que paguen con la ley y cumplan su condena en la cárcel, ha sido difícil para la PGR este trabajo, aún siguen los atentados y las autoridades no hacen ni acto de presencia. En otras palabras nada ha cambiado, no hay periodista que se sienta seguro o libre de escribir, no existe respeto por la autoridad, mucho menos miedo. Le ha faltado mano dura a los responsables de nuestra seguridad.
Héctor De Mauleón es uno de los periodistas que no ha parado de escribir la verdad e informar a los ciudadanos lo que es de interés, este tipo de datos son los que molestan a algunas figuras. Ya ha recibido muchas amenazas, no han cesado y cada vez son más intimidantes y despiadadas. Esta última en las redes sociales es un completo acto de cobardía, esconderse atrás de una computadora, escribir agresiones, ¿los hace sentirse poderosos? ¿Seguros?, hacerlo por redes sociales, donde todo es público significa que ¿todos debemos temer?
Van al menos cinco registradas en la red social Twitter, la última incluye un video con la fotografía del periodista y la leyenda: “Sr Héctor la sentencia está por cumplirse, la muerte le ha llegado”. El cobarde coloca una foto de De Mauleón, empuña un revólver y dispara en seis ocasiones sobre la imagen del periodista. Esta persona con el usuario @GayoFlipa, quien por cierto coloca su ubicación en la delegación Tláhuac, vacía la carga en la foto, en pleno rostro del escritor.
Es terrible la forma en las que la delincuencia busca intimidar, exponer estas amenazas en público habla de lo seguros que ellos se sienten para hacer estos actos, quiero suponer que ante esa situación las autoridades se pondrán a trabajar y cuidar la integridad de este periodista. En la misma red social hubo usuarios que se solidarizaron con él, le pidieron que se cuidara y un usuario le externo: » cuídese, periodistas buenos y honestos nos faltan». ¡Caray!, la autoridad no puede permitir que esta amenaza como tantas, quede impune. ¿Hasta dónde le darán permiso de llegar a la mafia?, ¿qué falta? ¿Otro más?
Twitter: @sairagomez