“Hasta el suegro del Tío, Cesar Augusto Morando, fue a parar al bote por hacer negocios con la fidelidad” El filósofo de la Mixtequilla

Las opiniones se dividen entre la gente; hay quienes piensan que el asunto de Javier Duarte de Ochoa es político y que el gobierno mexicano ha pactado con él su extradición para encargarle algunos “trabajos especiales” que tienen que ver con la sucesión presidencial y la gubernamental en Veracruz; otros, que le ha llegado la hora al político más cínico de todos los que hemos visto a lo largo de la historia, que las acusaciones de asociación delictuosa y lavado de dinero son tan sólidas que el maldito gordo pasará cuando menos cuarenta años de su robusta existencia en el bote, mientras Karime, la reina de la abundancia, disfruta de las mieles de lo robado en compañía de quien quiera en Europa, total, lana le sobra para comprar lo que su incontinencia le pida, y los más lamentables comentarios son de ciudadanos conformistas (que hay muchos) para quienes ni una cosa ni otra, que lo que suceda con Duarte no les interesa un comino porque él robó dinero de las arcas públicas, no directamente de la cartera de los ciudadanos… Sí hay quienes piensan así.

Estas opiniones, todas muy respetables, cada quien las modela en la medida en que posee conciencia política y conocimiento sobre lo que significa el trabajo de gobernar, y en esa medida se hacen juicios torpes o maduros.

A nosotros nadie nos hace variar nuestra percepción del caso: el presidente Enrique Peña Nieto protege al gordo Duarte y es por eso que nadie le hará nada. Las denuncias que se hacen en su contra en la PGR se han encargado de suavizarlas, de maquillarlas, de ponerlas a tono para que los abogados defensores de Duarte la puedan echar por tierra y, cuando se haya cumplido el objetivo para el que fue llamado a cuentas Javier, ahí terminará todo. Los veracruzanos nos quedaremos con un palmo de narices esperando que algún justiciero venga y nos vuelva a vender la promesa de que meterá a la cárcel a los corruptos y además les quitará lo que nos han robado.

Y nos pregunta uno de esos cándidos ciudadanos: ¿Nos han robado? ¡Claro! El dinero del que dispusieron Duarte y su célula delincuencial era dinero que pagamos con nuestros impuestos, destinado a la realización de obras, a la compra de medicamentos, para invertir en seguridad pública, para crear la infraestructura que se requiere para que vengan inversionistas a crear miles de empleos, para aumentar los salarios de los trabajadores al servicio del estado, para garantizar sus plazas, para la educación, en fin, para alcanzar el bienestar y el desarrollo de los veracruzanos y del estado en general; sí era dinero nuestro.

Por eso, indigna ver cómo se va diluyendo el asunto, cómo el marrano se burla cínicamente de nosotros, no del gobernador Miguel Ángel Yunes, con quien a lo mejor hasta acuerdos tiene, ni de la justicia mexicana a la que ha comprado con lo que nos robó. No, se burla de todos los veracruzanos que permitimos que llegara a la gubernatura y luego que dispusiera de los fondos públicos para su bolsillo, dejando a todos en el rezago social, en la violencia que padecemos por falta de recursos y el desempleo que esto ha generado, e hipotecados por quien sabe cuántos años más.

¿Que se recupere el dinero que se robó? Es una ilusión. Entre tanto corrupto que hay en los gobiernos, soñar que Duarte y su pandilla regresen lo que se llevaron es infantil.

Contra Javidu no hay pruebas

Dicen, y lo hacen bien, que los políticos son rateros, no pendejos. Es por eso que el abogado de Duarte en Guatemala, Carlos Velásquez, sigue afirmando que “no hay suficiente contundencia” en las pruebas contra Duarte, por lo que optó por aceptar la extradición para que pueda estar “lo más pronto” ante las autoridades mexicanas.

“No aparece directamente su nombre en las pruebas en su contra”, señaló. Además, ni las empresas ni presuntos testaferros que enlistó el gobierno mexicano “tuvieron alguna relación económica (con Duarte) para poder determinar que hubo algún traslado de dinero”. ¡Madres!, para que vean que tenemos razón, este país es el paraíso de la impunidad.

Licuadora, aspiradora y trituradora

En opinión del economista Rafael Arias Hernández, la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) mantiene prendida no solo la “licuadora” sino también la “aspiradora” para los recursos, y hasta la trituradora.

En entrevista durante la presentación del Centro de Información Estadística y Geográfica del Estado de Veracruz (CIEGVER), el investigador del Instituto de Investigaciones y Estudios Superiores Económicos y Sociales (IIESES) aseguró que la actual administración estatal superará lo que provocó el exgobernador Javier Duarte de Ochoa en las finanzas públicas. Explicó que la “licuadora” se centra en concentrar los recursos y dispersarlos para rubros no previstos, mientras que la “aspiradora” fue encendida por la Federación que quiere recuperar los recursos que fueron desviados por la pasada administración, así como algunas cuentas por cobrar.

Transformando el marco legal de Veracruz

Ayer martes, quedó aprobado el Dictamen que reforma diversas disposiciones de la Ley 875 de Transparencia y Acceso a la Información Pública para el estado de Veracruz de Ignacio de la Llave. En su participación en tribuna, la diputada local panista, Cinthya Lobato emitió un reconocimiento público a los diversos  colectivos sociales y expertos académicos quienes con su participación contribuyeron a enriquecer la nueva Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública.

Con los ciudadanos estamos transformando el marco legal de Veracruz”, con esas palabras, la diputada xalapeña reconoce e invita a los ciudadanos a participar, contribuir con su granito de arena a la grandeza de nuestro estado. Si queremos que las cosas cambien, es necesario que como veracruzanos participemos y no seamos solo espectadores. Hoy hay una nueva Ley de Transparencia que obliga a los diversos entes públicos a rendirnos cuentas. Hagamos uso de ese derecho. También es importante exigir a nuestros representantes populares cumplan con sus promesas de campaña y pidamos cuentas sobre el manejo de nuestros recursos, los cuales aportamos todos con el pago de nuestros obligaciones fiscales.

 

Enrique Márquez, un fiasco

Aunque obtuvo una maestría en Política Cultural y Administración en la Universidad de Londres y antes estudió en Harvard, el nuevo director del Instituto Veracruzano de la Cultura (Ivec) Enrique Márquez, ha resultado un fiasco, debido sobre todo a que no sabe aprovechar las sugerencias de los veracruzanos. Eso dice el investigador universitario Juan José Barrientos quien ya se cansó de entregarle proyectos (gratuitos) a Enrique Márquez y ninguno ha aprovechado.

La Fiscalía, infiltrada

Está confirmado que la delincuencia organizada tenía infiltrada a la Fiscalía General del Estado en la zona sur y por esto renunció el titular regional de la FGE en la zona, Ricardo Morales Carrasco, quien envió un mensaje vía Facebook: “Por otras encomiendas laborales y profesionales, he decidido presentar mi renuncia al cargo de Fiscal Regional de la zona sur de Coatzacoalcos”. Una nota del periodista especializado en nota roja, Juan Antonio Valencia Patraca, detalla que Morales Carrasco fue quien operó favores para el “Comandante H”, como el hecho de haber suspendido la necropsia a Bernardo Cruz Mota, persona muy cercana al jefe regional de la delincuencia organizada.

50 secuestros en lo que va del año

El alcalde de Coatzacoalcos, Joaquín Caballero Rosiñol, revela que en lo que va del año se han registrado ¡50 secuestros!, de los cuales más de la mitad de los plagiados han sobrevivido pero el resto, no. Por lo anterior es que ya hay un éxodo de gente que prefiere dejar sus casas, negocios y pertenencias en Coatzacoalcos, e irse a vivir a otro lado, y no correr el riesgo de perder la vida.

Reflexión

¿Qué pronto les llevarán salsa de Molcajete a los reos del duartismo que se encuentran en Pachuca? Todo parece indicar que sí, que la orden de arriba ya se dio.

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