En su columna política del diario capitalino El Universal, el periodista Carlos Loret de Mola publicó este miércoles un texto titulado “La lista de 8” en el que refiere que “el año pasado, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) reveló que varios gobernadores y exgobernadores estaban bajo investigación por fraudes fiscales.”
El también conductor del noticiero matutino de Televisa comentó que aunque posteriormente corrió la historia de que eran cinco, “según fuentes muy confiables, en realidad se trataba de ocho figuras cuya (mala) fama trasciende el ámbito de sus estados y se ha vuelto materia de observación nacional”. De los ocho personajes enlistados por Loret de Mola, siete son exgobernadores: Andrés Granier, de Tabasco, actualmente encarcelado por un desvío superior a los 10 mil millones de pesos; Javier Duarte, de Veracruz, recién aprehendido en Guatemala; Guillermo Padrés, de Sonora, también en prisión; Roberto Borge, de Quintana Roo; Humberto Moreira, de Coahuila; Rodrigo Medina, de Nuevo León, y Ángel Aguirre, de Guerrero; el octavo sería el panista veracruzano Miguel Ángel Yunes Linares, único mandatario estatal en funciones.
Del gobernante de Veracruz, Loret de Mola consigna que es un caso singular. “El gobierno federal lo empezó a investigar mientras competía por la gubernatura. Tras vencer en los comicios, el asunto del expediente contra Yunes ha subido y bajado de nivel un poco en función de los arreglos políticos y el tono del discurso del ya mandatario veracruzano. El gobernador ya anda en otras: se ha vuelto un aliado estratégico del gobierno federal en la pugna contra Andrés Manuel López Obrador y, sin ir más lejos, las dirigencias estatales del PAN y PRD en Veracruz lo destaparon ayer para la Presidencia en 2018.”
Por eso, el nuevo capítulo de la telenovela protagonizada por la diputada local Eva Cadena, expulsada de la bancada de MORENA a raíz de los videos en que inicialmente aparece recibiendo dinero ilícito para su abortada campaña a la alcaldía de Las Choapas, al parecer ya no surtió el mismo efecto mediático en contra del partido y de los operadores políticos de López Obrador en Veracruz, y sí, en cambio, alentó el sospechosismo de que detrás de esta guerra sucia para desacreditar a los morenistas y a su dirigente nacional estaría Yunes Linares.
La aparición de la diputada Cadena en una conferencia de prensa convocada este miércoles en la Ciudad de México pretendió ser un golpe propagandístico bien calculado, a solo unas horas de que concluyan las campañas e inicie la veda electoral, y a casi cuatro días de las elecciones que el próximo domingo se realizarán en Veracruz y en el Estado de México, donde Yunes y el presidente Peña Nieto tienen como enemigo común al lopezobradorismo que amenaza seriamente sus cotos de poder, ya que en Coahuila y Nayarit las gubernaturas están por repartírselas el PAN y PRI.
En cambio, los resultados electorales en el Edomex y Veracruz serían cruciales para la sucesión presidencial de 2018, dado que ambas entidades cuentan con el primero y cuarto padrón electoral del país.
Para bajar a MORENA de las preferencias electorales, Yunes deberá ser mucho más creativo. El nuevo montaje con la diputada Cadena ya dejó de ser creíble y se duda que tenga el impacto electoral que calculaba, pues en la conferencia de prensa la legisladora sureña se mostró muy interesada en limpiar el nombre de la hermana del fiscal yunista Jorge Winckler, implicada por los morenistas en los videos que requisó la Fiscalía y que según la diputada federal Rocío Nahle fueron editados, filtrados a los medios y luego sospechosamente desaparecidos.
Narcisismo político
Por cierto, también este miércoles el columnista de El Universal, Salvador García Soto, en su texto titulado “Miyuli y su sueño guajiro 2018” hace una revelación muy interesante: “Hace meses el gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, se acercó al director de un periódico de la Ciudad de México para pedirle un extraño favor: ‘Méteme en tus encuestas. Quiero aparecer entre los aspirantes presidenciales del PAN, haz que me metan’. A cambio de aparecer mencionado entre los precandidatos panistas, el mandatario veracruzano ofrecía una generosa suma de dinero. No sabemos si la oferta se concretó o si el favor se le hizo, pero ayer que, de manera ‘espontánea’ los dirigentes estatales de Acción Nacional y de la Revolución Democrática ‘destaparon’ a Yunes Linares como prospecto de una alianza entre esos dos partidos para 2018, la anécdota que cuentan de primera mano cobró sentido.”
¿Pues no que no iba a usar los recursos públicos del gobierno del estado para que los medios de comunicación hablaran bien de él?
Si no fuese cierta esta versión, lo conducente sería que Yunes mandara una carta aclaratoria al diario capitalino para desmentir al columnista García Soto.
De no hacerlo estaría dándoles la razón a quienes lo comparan con los exgobernadores priistas Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa, de los cuales resultaría un pésimo imitador.