Desde hace al manos una década, diferentes investigadores y especialistas en el tema ambiental han alertado sobre el problema de la erosión de playas en todo el litoral nacional y particularmente en el Golfo de México.
Hace un par de años, en marzo de 2014, por ejemplo, Saúl Miranda Alonso, coordinador del Centro de Estudios y Pronósticos Meteorológicos de la Secretaría de Protección Civil, dio a conocer que en prácticamente toda la entidad veracruzana estaban desapareciendo las playas y las zonas de arrecifes por problemas de erosión.
Alvarado, Costa Esmeralda de Golfo, Boca del Río, Tamiahua son algunas zonas que enfrentan dicho problema, informó el funcionario, quien apuntó que para investigar y enfrentar dicha situación, el gobierno del Estado; el Instituto de Ecología, Inecol; las secretarías de Marina y Defensa Nacional del gobierno federal; la Universidad Veracruzana; y la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales del gobierno estatal, integraron un grupo multidisciplinario.
Por su parte, Virgilio Arenas Fuentes, investigador del Instituto de Ciencias Marinas de la Universidad Veracruzana, también habló de la desaparición gradual, por erosión, de playas en Veracruz, Boca del Río, Actopan y Antón Lizardo.
En el documento elaborado por el Instituto de Ecología, Inecol, con el título “Manglares y Dunas de Veracruz, se aborda dicha situación y se destaca que en los últimos 34 años hay zonas costeras que han perdido hasta 40 metros de playa debido a tres factores básicamente: los fenómenos naturales, los asentamientos humanos y la industria turística.
En el mencionado estudio se ubica como zonas seriamente afectadas por la erosión a las playas de Nautla, Chachalacas, Boca del Río y Alvarado.
El tema generó un ambiente de preocupación no sólo entre los ecologistas, sino también entre los prestadores de servicios turísticos, como los propietarios de hoteles y restaurantes que se ubican en la zona costera.
Ante dicha situación, que es, decía, un problema nacional, el gobierno federal anunció medidas específicas y destinó recursos para ello. El año pasado, el titular de la Secretaría de Turismo, Enrique de la Madrid Cordero, destacó que con recursos públicos y privados se rescatarían las playas de nuestro país.
No habrá más recursos para el rescate
El funcionario federal recordó que el Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018 contemplaba un presupuesto de seis mil millones de pesos para 16 destinos turísticos de playa que demandaban atención: Los Cabos, Mazatlán, Puerto Vallarta, Manzanillo, Ixtapa, Acapulco, Cancún, Riviera Maya, Isla Mujeres, Cozumel y Veracruz-Boca del Río, entre otros.
De la Madrid Cordero apuntó que también se confirmaron problemas de erosión en Tecolutla, Veracruz; Progreso, Yucatán; Playa del Carmen, en el municipio de Solidaridad, Quintana Roo; y Holbox, en Lázaro Cárdenas, Quintana Roo.
Ese anuncio, aunque insuficiente, generó cierta tranquilidad en el sector turístico; sin embargo, este año se anunció que el programa de recuperación de playas, debido al recorte al gasto que contempla el Presupuesto de Egresos de la Federación, dejará de operar en 2017.
A pesar de que el avance registrado, con respecto a la meta trazada, apenas es de 1.5 por ciento, el siguiente año no habrá trabajos de saneamiento, al menos por parte del gobierno federal.
Lamentablemente, de los seis mil millones de pesos a los que se refirió el secretario de Turismo del gobierno federal, entre 2015 y 2016 sólo se aplicaron poco más de 90 millones de pesos, por lo que se infiere que el rescate de las playas nacionales no se encuentra en las prioridades federales y mucho menos en la agenda del gobierno estatal.
Desactivan problema entre gobierno estatal y Antorcha
La semana pasada, el día 13 de septiembre, un nutrido grupo de militantes de Antorcha Campesina salió a las calles para exigir al gobierno del estado el depósito de recursos que la Federación destinó a municipios con presencia del movimiento antorchista.
La denuncia de los antorchistas señalaba que los recursos, algo así como 190 millones de pesos, fueron gestionados ante la Federación por los seis diputados federales de Antorcha, para ser aplicados en el mejoramiento de las condiciones de escuelas públicas en diferentes municipios veracruzanos.
El recurso fue enviado desde el altiplano el pasado 5 de septiembre, pero la Sefiplan no lo canalizó a los ayuntamientos beneficiados, por lo que Antorcha salió a las calles y la capital veracruzana fue asfixiada por los bloqueos; un verdadero caos.
El pasado jueves, el gobernador Javier Duarte sostuvo una reunión con el dirigente estatal de la organización, Samuel Aguirre Ochoa, y con la diputada local Minerva Salcedo Baca, ante quienes se comprometió a que los recursos se liberarían este martes.
En el seguimiento del caso, el problema entre el gobierno del Estado y Antorcha Campesina amenazaba con estallar una vez más, dado que en la Secretaría de Finanzas les informaron a los antorchistas que no tenían dinero para realizar las transferencias.
Como consecuencia, el dirigente de Antorcha en Veracruz informó que la agrupación volvería a las movilizaciones, a los bloqueos; eso ocurrió al mediodía de este martes; sin embargo, por la tarde, el gobierno estatal finalmente cumplió con los depósitos acordados y con ello se pudo desactivar un nuevo problema. @luisromero85