En una breve visita que hicimos a las playas veracruzanas, del puerto y Boca del Río, se nos vino a la mente la denuncia pública que hizo Ramón Poo, alcalde del puerto de Veracruz, sobre extrabajadores del desaparecido Sistema de Agua y Saneamiento (SAS); denuncia en la que se afirmó que el personal en cuestión deshabilitó parte del sistema de la planta de tratamiento de aguas negras de la zona norte del municipio porteño por lo que, según Poo, se virtieron  mil 200 litros por segundo de aguas negras al mar.

Eso de que las playas de Veracruz no están en condiciones para los bañistas es añejo, hay quienes afirman que los desechos de algunos hoteles y centros comerciales son vertidos a las playas sin regulación, aunque es sano también aclarar que las tuberías abiertas que desembocan en algunas zonas de playa en la conurbación de Veracruz y Boca son del sistema pluvial y no del drenaje.

Imaginemos que en verdad llegaron tantos miles de litros al mar. ¿Sabe el impacto que causarían a la salud y el ecosistema?. Va un comparativo para que podamos empezar a medir el tamaño de la supuesta acción. Las aguas negras sin tratar llevan una peligrosa carga de bacterias infecciosas, virus, parásitos y sustancias químicas tóxicas. Cuando termina en el agua que bebemos y usamos para fines recreativos, en los mantos freáticos y en los sótanos de nuestras casas, causa graves daños a la salud de los seres humanos y en el medio ambiente.

Cada año se producen entre 1.8 millones y 3.5 millones de enfermedades por nadar en agua contaminada por derrames de aguas negras y otras 500 mil por beber agua contaminada. Los costos en atención médica para EE.UU. por el consumo de mariscos contaminados con aguas negras fluctúan de $2.5 millones y $22 millones al año, recordemos que en la zona frente a las playas de Boca del Río y el Puerto la pesca es una actividad común de la que se consumen productos en los restaurantes de la región.

En cuanto al ecosistema, en los arrecifes de los Cayos de la Florida, el 70 por ciento de los corales elkhorn han sido arrasados por la viruela blanca, que es causada por bacterias que se desarrollan en los intestinos de los seres humanos. En cuanto al territorio nuestro, el parque marino arrecifal situado entre Antón Lizardo y Playa Norte de Veracruz, es un ecosistema muy grande que representa un atractivo turístico y ha servido como barrera para el impacto de fenómenos meteorológicos, el daño que se le haga impactaría directamente en la población.

Cierto o falso, y de proceder o no la denuncia que comentamos al principio, un daño al medio ambiente debe ser castigado con todo el peso de la ley pues su impacto al desarrollo de un ecosistema merma también las condiciones de vida de la población; habrá que vigilar muy de cerca a quienes tiene ya la operación del sistema de agua y saneamiento en cuestión para que, primero cumplan con lo que la legislación laboral les obliga y, segundo, su servicio sea el que merece la población sin impactar al medio ambiente… ¡Aguas! Escriba a nmrossete@nullyahoo.com.mx formatosiete@nullgmail.com www.formato7.com7columnistas