En un texto anterior, referíamos que en opinión de analistas políticos como Jacqueline Peschard, “la pugna interna del PRD sobre las alianzas electorales para este 2016 no es por principios ideológicos, ojalá y así fuera”, sino que “se trata, como siempre, de una pelea por definir cuál de las corrientes que lo integran se queda con la maquinaria del todavía hoy principal partido de izquierda”.
La académica de la UNAM, en un reciente artículo publicado en el diario capitalino El Universal, exponía que “el centro de la atención se ha colocado en Veracruz que, para el dirigente del PRD (Agustín Basave) es la joya de la corona, en primer lugar por las dimensiones poblacionales y electorales del estado y porque no ha tenido alternancia en el poder y es paradigma nacional de la corrupción y la inseguridad”.
Sin embargo, Peschard criticaba que no se debatiera “la dudosa calidad moral y política” del candidato del PAN, Miguel Ángel Yunes Linares. “Basave ha insistido que la alianza busca construir ‘bloques programáticos y de gobierno’ para rescatar al estado de los abusos del régimen autoritario del PRI, ¿de verdad piensa que su propuesta es viable con ese candidato?”, cuestionaba la socióloga, ex comisionada del Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI) y ex consejera ciudadana del Instituto Federal Electoral (IFE).
Basave, quien inclusive chantajeó con renunciar a la dirigencia nacional del PRD para presionar a las tribus perredistas que se oponían a la alianza con el PAN en Veracruz, parece haber calculado y apostado mal con Yunes Linares, cuyas expectativas las había fincado en la anunciada ruptura priista si el grupo en el poder hubiera impuesto al candidato del PRI a la gubernatura como lo pretendía. Empero, el consenso de los demás aspirantes del tricolor a favor del senador Héctor Yunes Landa habría desinflado las posibilidades de triunfo del diputado federal del blanquiazul, quien casualmente emprendió una campaña de descalificaciones y denuestos en contra de su primo hermano en cuanto trascendió su inminente postulación como precandidato único del Revolucionario Institucional.
El sábado 16, dos días después del pacto de unidad firmado en el CEN del PRI, Yunes Landa acudió en Xalapa a la comida conmemorativa del noveno aniversario de la asociación priista “Concertación Veracruzana” que preside Jorge Uscanga Escobar. Ahí, en entrevista, el senador respondió sobre los señalamientos de Yunes Linares que “sentí que con un primo hermano no tenía que ponerme de acuerdo para respetarnos; la familia se respeta y eso lo trae uno en la sangre desde que eres bebé, lo mamas; yo lo mamé muy bien y a mí no me van a sacar de este esquema”.
“Yo no voy a responder porque yo sí tengo principios; sí duele, sí lastima, lo debo reconocer. Y me duele ser mal correspondido cuando yo he dado la cara (ante las agresiones) a mi familia, directamente a mi primo hermano”, reprochó.
Este martes, a través de un comunicado, Yunes Landa celebró el triunfo en Colima de su correligionario Luis Ignacio Peralta, cuya victoria, dijo, “se cimentó en propuestas viables, que es lo que los ciudadanos demandan de parte de sus representantes populares y de sus gobernantes, y no la diatriba o el populismo”. Por eso, el senador anunció que en su campaña resaltará ser una persona honesta, sin problemas de lealtad y carente de señalamientos de indecencia. Y descartó de plano subirse al ring con su primo hermano. “Te peleas por la familia, no con la familia”, le mandó a decir. Según trascendió, en breve podría darse un cónclave de toda la familia Yunes para reiterar que los lazos consanguíneos no deben vulnerarse por las disputas de poder.
Pero Héctor Yunes tampoco descuida a su otra “familia”, la del partido tricolor, pues refirió que precisamente “Colima es un claro ejemplo para el priismo nacional de que, es en la suma de voluntades, de esfuerzos, como podemos, juntos, ganarnos la confianza de la gente, conseguir el triunfo en los comicios, por más cerrados que parezcan”. Y en abono de esa unidad, la mañana de este martes invitó a desayunar en su domicilio particular al diputado federal Alberto Silva Ramos, quien a través de su cuenta de Twitter le agradeció a Yunes Landa su invitación a desayunar en su hogar. “Con inclusión y unidad vamos a ganar. Estamos listos!”, tuiteó el legislador tuxpeño, quien desde que arribó al Congreso de la Unión, en septiembre pasado, encabezó una fuerte campaña en contra de Miguel Ángel Yunes por presunto enriquecimiento ilícito, uno de los motivos por el que, en octubre, Yunes Landa lo había vetado para la dirigencia tricolor.
Ahora las circunstancias los han aliado. Y es que en su comunicado, Héctor Yunes subrayó que al igual que en Colima el domingo anterior, “es en la unidad como se logrará el triunfo en los otros 12 estados donde este año se efectuarán elecciones, incluido Veracruz”, pues además destacó el trabajo que el dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, ha realizado para lograr candidaturas de unidad en todo el país, que, dijo, fortalecen aún más a este instituto político.
Por cierto, a cada miembro del CEN del PRI le fue asignado una de las 12 entidades donde en junio próximo se elegirán gobernadores. Beltrones decidió hacerse cargo directamente de Veracruz, ya que aparte de su estrecha relación personal con Yunes Landa, la entidad veracruzana es la joya del priismo que la alianza PAN-PRD, con Miguel Ángel Yunes de candidato, pretenden arrebatarle al partido tricolor. “¡Se vale soñar!”, dicen los beltronistas.