Con motivo del quinto informe de gobierno, este lunes 30 le toca comparecer ante el Congreso local a Tomás Ruiz González, titular de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP). ¿Qué va a informar? Prácticamente nada. De hecho, durante las últimas semanas lo único que ha estado publicitando en los medios de comunicación de la entidad y del Distrito Federal ha sido su imagen personal y un video en el que subliminalmente se promociona en Facebook, Twitter y YouTube como aspirante a la gubernatura para “construir el Veracruz que siempre soñamos…”
Ruiz González, quien en la sucesión estatal de 2003 también buscó la candidatura priista alentado por el gobernador saliente Miguel Alemán Velasco –el cual, de última hora lo dejó colgado de la brocha tras las presiones que el mandatario veracruzano recibió por parte de influyentes aliados, amigos y parientes políticos del entonces senador Fidel Herrera Beltrán, que finalmente lo relevó en la gubernatura–, emprendió desde hace un par de meses una campaña muy sutil que abarca presencia de medios de comunicación, cobertura personal de obras en varios puntos del estado, así como el uso de las redes sociales.
Y es que poco después del proceso electoral federal de junio pasado, comenzó a deslizar que él podría ser el “caballo negro” en la sucesión gubernamental de 2016 ante la abierta confrontación de los senadores priistas y aspirantes punteros Héctor Yunes Landa y Pepe Yunes Zorrilla con su jefe, el gobernador Javier Duarte de Ochoa, que prendió desde diciembre del año pasado y cada vez se fue exacerbando más. Por ello, a partir de julio mandó a colocar en Xalapa, en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río y en otras ciudades del estado sendos anuncios espectaculares de revistas en cuyas portadas aparece su imagen con una leyenda propagandística que reza: “Traemos Resultados para Veracruz”.
Pero lo cierto es que Tomás Ruiz nunca ha tenido la más remota posibilidad de ser abanderado por el PRI bajo ninguna circunstancia. Y si acaso aún albergaba alguna esperanza, este viernes 27 debió congelársele en el Cofre de Perote luego de la comida de la unidad que encabezó el dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, en el rancho San Julián, la cual fue convocada y organizada para propiciar el reencuentro de los senadores Yunes Landa y Yunes Zorrilla, el anfitrión, con el gobernador Duarte y otros aspirantes a la gubernatura más cercanos al jefe del Ejecutivo del estado, como el presidente del CDE priista, Alberto Silva Ramos, y el ex secretario de Gobierno y actual coordinador de los diputados federales veracruzanos del tricolor, Érick Lagos Hernández. Ruiz González también asistió, pero sólo fue un invitado de piedra.
Las posibilidades del titular de la SIOP son totalmente nulas, pues al parecer sigue vetado en el primer círculo del presidente Peña Nieto. ¿La razón? Unos la atribuyen a los nexos que tuvo con la ex lideresa del SNTE, Elba Esther Gordillo, actualmente presa por lavado de dinero; otros a que en la campaña presidencial de 2012 su novia por ese entonces, la actriz veracruzana Ana de la Reguera, grabó un spot en contra del candidato priista, por el cual fue persuadido a través del gobernador para que impidiera su difusión.
Ello parece explicar que en marzo de 2013, cuando decidió renunciar como secretario de Finanzas y Planeación y Javier Duarte intentó justificar que su salida del gabinete se debía a que tenía invitaciones para incorporarse al gobierno federal, el mexiquense jamás lo incluyera en su administración. Y después, a principios de este año, trascendió que anduvo tocando puertas en la ciudad de México para que lo consideraran para una candidatura plurinominal a la LXIII Legislatura federal, pero en el CEN del PRI –partido al que se reafilió en 2012 luego de haber sido dirigente nacional de Nueva Alianza de 2006 a 2007 impuesto por la maestra Gordillo– no lo quisieron incluir en la lista de candidatos a diputados federales de representación proporcional.
Así, pues, sin padrinazgos políticos fuertes en la capital de la República, las aspiraciones de Ruiz sólo dependerían de su actual jefe, pero Duarte tampoco pudo o quiso promoverlo a la diputación federal como sí lo hizo en cambio con otros de sus ex colaboradores –Beto Silva, de Tuxpan; Erick Lagos, de Acayucan, y hasta Adolfo Mota, del distrito de Xalapa Rural–, a los cuales estaría tratando de impulsar también para sucederlo en la gubernatura.
Es más, en la conferencia de prensa que convocó el pasado lunes 23, al preguntársele si el titular de la SIOP no contravenía la ley electoral al promocionarse con el video que estaba difundiendo a través de las redes sociales, Javier Duarte respondió de manera displicente: “No necesita mi aprobación, ni tampoco mi clausura porque son temas que tienen que ver con su participación en lo individual y como persona en lo particular. No tiene nada que ver con el gobierno de Veracruz ni con la labor que desempeña y cada quien está en la disposición de hacer en su espacio personal lo que a sus intereses convenga. Ni fui informado ni tengo por qué haberlo sido, ni tengo ningún comentario en torno a este tema”.
Sin embargo, Duarte puntualizó que lo que sí le pediría a Ruiz es que no se distrajera de sus responsabilidades como secretario de despacho. Y Tomás haría bien en hacer a un lado sus quimeras y atender mejor la instrucción de su jefe, ya que, por ejemplo, nos hicieron llegar constancias médicas y testimonios de una empleada de base de la SIOP que pertenece al Sindicato de Trabajadores al Servicio del Poder Ejecutivo, a la cual le dejaron de pagar su salario desde el mes de mayo, lo que ha agravado no sólo su endeble situación económica sino poniendo también en grave riesgo su salud ya que padece una enfermedad incurable llamada Lupus Eritematoso Sistémico que le impide laborar, por lo que el IMSS le otorgó una licencia médica por dos años a partir del 2 de julio del presente año.
Y aunque por escrito le ha implorado respetuosamente a Tomás Ruiz que por humanidad resuelva su caso –“no pido nada que no me corresponde señor Secretario, sólo pido lo que me pertenece”, le expuso–, hasta ahora el aspirante priista a gobernador, en cuyo video en el que se autopromociona destaca que Veracruz es “tierra generosa y de oportunidades, con gente que se esfuerza día con día en salir adelante”, no se ha dignado a corregir la indignante situación salarial de esta trabajadora que padece tan serio deterioro físico.