Parece que fue ayer y sin embargo ya pasaron 14 años de aquella memorable XVIII Asamblea Nacional Ordinaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la que una corriente de la élite priista falló en su intentona por reformar la fracción X del artículo 166 de los estatutos del tricolor para eliminar los “candados” que habían sido impuestos contra los tecnócratas que aspiraban a ser candidatos a las gubernaturas y a la Presidencia de la República sin haber ejercido previamente otro cargo de elección popular.
Como se recordará, en esa asamblea priista se instalaron mesas de debate en varias sedes regionales del país. En el puerto de Veracruz, por ejemplo, sesionó precisamente la que se encargaría de revisar los Estatutos, para lo cual –según trascendió en aquella ocasión, noviembre de 2001– los operadores políticos del entonces gobernador Miguel Alemán Velasco se habrían aplicado a tratar de persuadir a la mayoría de los delegados partidistas provenientes de otras entidades para echar abajo los “candados” estatutarios que imposibilitaban a algunos funcionarios alemanistas a suceder a su jefe en el año 2004.
Ahí, de hecho, les ganó la partida y prácticamente la candidatura Fidel Herrera Beltrán, a la sazón senador de la República, quien se movilizó e hizo alianzas con otros líderes priistas para impedir que se reformara ese artículo de los Estatutos del partido tricolor.
Pero… ¡vueltas que da la vida! Y es que este sábado, en la XXXV reunión extraordinaria del Consejo Político Nacional del PRI en la que se aprobaron diversos acuerdos encaminados a preparar al partido para las elecciones de 2016, en las que se elegirán 13 gubernaturas –incluida la elección extraordinaria en Colima–, además de la renovación de las cinco presidencias municipales en Baja California y de los congresos locales en 12 de las entidades en que habrá cambio de gobierno, los consejeros priistas acordaron abrirse a la sociedad y establecer una plataforma ciudadana para robustecer la calidad de su representación popular, una decisión sin precedente que evidentemente refleja la magnitud del reto electoral que están por enfrentar el año próximo.
Reunidos en la sede del PRI, los consejeros nacionales validaron la decisión de la Comisión Política Permanente sobre la participación de ciudadanos simpatizantes en los procesos de postulación de candidatos al Congreso de la Unión, a gobernadores y a jefe de Gobierno del DF, cuando su prestigio, fama pública y los estudios demoscópicos (encuestas) señalen que se encuentran en un nivel de reconocimiento y aceptación superior al de los militantes que aspiren al mismo cargo (artículo 166).
Es una decisión que se hace efectiva por primera vez y que tiene como requisito que los ciudadanos que se inscriban manifiesten su simpatía con los principios ideológicos del PRI y su proyecto de transformación nacional.
El dirigente Manlio Fabio Beltrones dijo que a partir de esta innovación que sigue la ruta de modernización política para responder a las nuevas formas de participación ciudadana, se cuidará en todo momento la armonía interna del partido en cada entidad como una condición esencial para emitir las convocatorias de postulación de candidatos a puestos de elección popular que incluyan la figura de ciudadanos simpatizantes.
En apariencia dicho acuerdo del Consejo Político Nacional del PRI no aplicaría en esta ocasión en Veracruz, donde hasta el momento no se ve a ningún aspirante ciudadano simpatizante que pudiera estar en las preferencias electorales muy por encima de los senadores Héctor Yunes Landa y Pepe Yunes Zorrilla, que son los militantes del tricolor mejor posicionados hasta ahora en los estudios demoscópicos.
Pero mientras son peras o son manzanas, este viernes Yunes Landa –quien presume de encabezar las encuestas– acudió a la presentación oficial del ex gobernador y actual senador tamaulipeco Manuel Cavazos Lerma como nuevo delegado regional del CEN del PRI para los estados de Puebla y Veracruz, acto en el que obviamente estuvo presente también el dirigente estatal Alberto Silva Ramos, a cuya ceremonia de toma de posesión el mes pasado también asistió el legislador de Soledad de Doblado aunque “bajo protesta”.
¿Será acaso que Beltrones ya le dijo a don Héctor que si quiere ser candidato debe ir abonando “a la armonía interna del partido”?
Mónica Robles, puntual
La diputada local Mónica Robles Barajas aprovechó la comparecencia del secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, para tocar el homicidio del abogado y activista Rodolfo Zapata Carrillo, asesinado hace tres semanas en el puerto de Coatzacoalcos.
Robles expresó que las autoridades estatales deben velar por la tranquilidad de las familias y garantizar la libre expresión de las ideas.
La presidenta de la Comisión de Equidad, Género y Familia de la LXIII Legislatura recalcó que el asesinato del activista impacta a la sociedad veracruzana y genera temor entre quienes desean participar y exigir cuentas a sus gobiernos.