Poco antes de subir al avión que lo llevaría a Jojutla, Morelos, para estar presente en la reunión de la Conago, presidida por el presidente Enrique Peña Nieto, y en la que el secretario de Educación Pública Aurelio Nuño anunció la división del país en cinco zonas geográficas y entregó los Certificados para la Infraestructura Educativa (CIEN), el gobernador Javier Duarte de Ochoa recetó a la prensa local un rosario de buenas intenciones, cuyo principal ingrediente fue el anuncio del próximo despido de 2 mil 173 ‘aviadores’ que han cobrado sin trabajar en la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV).

En la madrugadora conferencia de prensa del lunes (convocada a las 7 de la mañana), el gobernador Javier Duarte fraguó, con su decálogo, el impacto mediático que lo hizo destacar entre los demás 30 mandatarios estatales y, en particular, sobre el gobernador saliente de Guerrero, Rogelio Ortega Martínez (quien concluye el periodo de Ángel Aguirre Rivero, renunciante a raíz del caso Ayotzinapa), a quien le hicieron manita de cochino para que aceptara descontar el día a miles de maestros guerrerenses que no acudieron a su trabajo por andar en marchas de protesta.

Tan bien le fue en esta reunión convocada para lograr el respaldo de los gobiernos locales a la Reforma Educativa, que el mismísimo Aurelio Nuño Mayer lo ponderó magníficamente este martes, durante una entrevista con Alejandro Cacho en MVS, por dar muestras claras de respaldo a la primera reforma estructural peñista, y lo puso como ejemplo: “Es la línea en la que tenemos que avanzar en todo el país, es el paso que dio ayer el Gobernador de Veracruz, al haber hecho este ejercicio y al haber detectado estas plazas de gente que no está cumpliendo con su labor”.

Nuño mencionó incluso la cifra dada por Duarte sobre el ahorro anual por 815.3 millones de pesos, que significará cortar estos suministros ilegales y cancelar las plazas, y señaló: “Es un gran paso para tener un mejor orden administrativo educativo en Veracruz, que era fundamental, que era clave; en este sentido, estamos reconocidos con el Gobernador y respaldamos estas acciones”.

¿Será verdad, será mentira?

Lo que sigue a ese anuncio (que a todos tomó por sorpresa, aunque ya sabemos que Duarte necesita recursos y de algún lado debe tomarlos), es aplicar sin dilaciones ni pretextos dicha medida elogiable pero, todavía más, extenderla a decenas de dependencias donde miles de ‘aviadores’, la mayoría compuesta por operadores políticos y chicas de compañía, convierten en polvo cualquier recurso, sobre todo cuando es tan escaso.

¿Cómo saber si, tras su anuncio, realmente se aplicarán las medidas correctivas y se pondrá en la calle a los más de 2 mil personajes sin rostro público que medran con un presupuesto que urge poner al servicio de la infraestructura educativa en la entidad? ¿Cómo creer que se someterá a la guillotina a muchos de los comisionados sindicales que cobran para realizar el trabajo político de los dirigentes magisteriales, y a aquellos que han servido como activistas en el PRI o como damas de compañía de políticos que no han encontrado mejor sitio para pagar los favores que abriéndole boquetes al enorme presupuesto educativo aportado por los gobiernos estatal y federal?

Con ser una medida exigida por los veracruzanos hace mucho tiempo, un aspecto no tomado en cuenta a la hora del anuncio fue cómo se va a castigar a quienes autorizaron estos actos de corrupción. Porque si las cuentas hechas por un diputado local panista son buenas, en promedio cada uno de los ‘aviadores’ recibía una iguala mensual superior a los 30 mil pesos mensuales.

Ciertamente, el Oficial Mayor de la SEV, Vicente Benítez, preocupado por ser el candidato a la diputación local por Los Tuxtlas en 2016, ha encontrado la forma de subirse al barco, señalando que no solo se dará de baja a los 2 mil 173 ‘aviadores’ inmediatamente, sino que también podría proceder penalmente contra quienes asignaron estas plazas y consintieron un quebranto patrimonial superior a los 815 millones cada año.

“Es un asunto que nos llevó poco más de ocho meses, a partir de la reforma y del censo que se hizo, es una revisión física y de cada uno de ellos, fue muy exhaustivo, es por eso que hoy estamos anunciando estas medidas, con el compromiso de que verdaderamente se les reconozca con más y mejores oportunidades a los verdaderos maestros de Veracruz, no personas que ostenten una plaza y que no sean maestros”, según explicó en una visita a Córdoba este martes.

Pese a dichas declaraciones, Adolfo Mota Hernández, quien ya cuenta con fuero como diputado federal, difícilmente será tocado por haber permitido esta enorme sangría durante los cuatro años en que disfrutó las mieles de su salario como secretario (que otra cosa no hizo).

Tampoco Flavino Ríos Alvarado puede llamarse inocente, aunque haya estado solo unos meses al frente de la SEV. El mismo que el 20 de enero de este año declaró a la prensa que no tenía conocimiento de ‘aviadores’ en la SEV, si bien reconoció que había profesores realizando funciones administrativas, una situación que prometió revisar, y que dos meses después, el 21 de marzo, afirmó categórico: “En la SEV no hay nadie que cobre sin trabajar”. Los anuncios del gobernador Javier Duarte de Ochoa han sido el más fuerte mentís a la palabrería de quien ahora funge como Secretario de Gobierno.

¿Más recursos se perderán?

Y sí, no solo recibió el aplauso del Secretario de Educación Pública en la reunión de Conago. Javier Duarte también anunció que en la reunión de Jojutla, Veracruz fue enterado de que recibiría 2 mil 453 millones de pesos para infraestructura educativa, que se sumarán a otros fondos para completar 3 mil 560 millones.

Esos recursos, junto con los 815 millones que significará el ahorro anual por la salida de ‘aviadores’, podrán ampliarse con la cancelación de 1 mil 585 plazas excedentes estatales, cuyos poseedores con más de 25 años podrán optar por la jubilación adelantada, y cuyas plazas serán congeladas.

Además, súmele los recursos que serán ahorrados si se ajustan las plazas incompatibles (por tiempo o lugar) que detentan varios vivales, principalmente los cercanos a los dirigentes magisteriales, muchos de los cuales cobran hasta por seis o siete plazas de tiempo completo, como si pudieran multiplicarse de la misma manera para cumplir con todas.

Todo ello, dijo Duarte, significará un ahorro anual de 1 mil 568.5 millones de pesos.

Las preguntas que le surgen a todos son: ¿se procederá con tabula rasa incluso con los cientos de sindicalizados que se ceban con los recursos de la SEV, despachándose con varias plazas?, ¿habrá un riguroso seguimiento de la aplicación de los recursos frescos que, tradicionalmente, han servido para todo menos para mejorar la educación pública de Veracruz?, ¿qué mecanismo permitirá al gobierno federal certificar que, efectivamente, todos los ‘aviadores’ serán expulsados del paraíso presupuestal?, ¿realmente se cancelarán sus ingresos a funcionarios públicos, dirigentes sindicales, diputados locales y federales, presidentes municipales, ediles y líderes partidistas?

Vamos a ver, dijo el ciego.

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