Este lunes, el alcalde xalapeño,  Américo Zúñiga Martínez, encabezó la reunión sobre el Plan de Acción Xalapa Sostenible, documento que fue elaborado en el marco de la inclusión de la capital veracruzana a la Iniciativa de Ciudades Emergentes del Banco Interamericano de Desarrollo.

Se trata de un intento por resolver los problemas de movilidad urbana en una ciudad donde el traslado de las personas se ha vuelto muy complicado y la vialidad, caótica.

Este no es el primer intento de una administración municipal por resolver el problema; los últimos 4 ayuntamientos han buscado, al menos en el discurso, una solución a ese, que es uno de los talones de Aquiles de Xalapa, pero ni uno tuvo éxito.

Ricardo Ahued anunciaba en octubre de 2005 la construcción del bulevar del Norte, del distribuidor vial de Las Trancas y del Libramiento de Xalapa; esas obras fueron útiles pero, con el tiempo, insuficientes.

David Velasco Chedraui presentó el Plan de Movilidad Urbana Xalapa 2009 pero las acciones anunciadas nunca se implementaron porque pudo más la presión del comercio que la decisión del ayuntamiento.

Algo parecido ocurrió durante la gestión de Elizabeth Morales García: la autoridad local presentó el plan de Movilidad Xalapa 360, que incluía cambio de sentido en algunas calles, rediseño de vialidades, sincronización de semáforos, circuitos de circulación continua, reestructuración de rutas del transporte y nuevas terminales para los camiones foráneos; de todo eso, nada.

Hoy, el gobierno que encabeza Américo Zúñiga retoma el tema e inscribe a la capital veracruzana en la Iniciativa de Ciudades Emergentes y Sostenibles del Banco Interamericano de Desarrollo; esta decisión puede considerarse como el paso más serio para alcanzar la solución a los problemas de la ciudad y hace ver a los anuncios de las anteriores administraciones como simples ocurrencias.

Durante la tercera semana de enero, al reunirse con autoridades municipales, del estado y la federación, Ricardo de Vecchi, coordinador para México de dicha iniciativa del BID, informó que los expertos que elaboraron el proyecto analizaron 117 indicadores base en materia medioambiental, fiscal y urbana, y consideraron que Xalapa debería convertirse en una ciudad más compacta.

Ese proyecto representa una inversión de 140 millones de pesos pero involucra un presupuesto de mil 269 millones para mejorar los problemas de hábitat urbano y movilidad. Se plantea, entre otros puntos, la actualización del Plan de Movilidad, el rescate de espacios públicos, un programa de ordenamiento urbano en la zona conurbada, así como la creación de un cinturón de áreas verdes que proteja el Bosque de Niebla y su biodiversidad.

El programa del  BID también considera acciones en materia de agua potable y gestión de residuos sólidos, que son considerados otros de los grandes problemas que enfrenta la ciudad.

Lo importante es que ya existen avances en esa materia y que Xalapa fue inscrita en el mencionado programa, que permite el acceso a los recursos para cubrir el precio de un proyecto que, sin el apoyo del BID, estaría fuera del alcance del ayuntamiento. Lo destacable, por otro lado, es que el gobierno local dio ese primer paso, la inscripción a la Iniciativa de Ciudades Emergentes, que será determinante para encontrar solución a los problemas de movilidad urbana.

Por cierto, Xalapa es una de las cinco ciudades mexicanas inscritas en el programa; las otras son Campeche, La Paz, Puebla y Toluca. @luisromero85