“Tendremos elecciones limpias, sin una Mancha” Alfredo Ferrari Saavedra
Para los 18 meses con siete días que le quedan al gobierno de Javier Duarte de Ochoa, el equipo de colaboradores que ha logrado formar, si no es el idóneo, sí cuando menos mucho mejor que con el que arrancó su administración, repleto de socios de Fidel Herrera Beltrán, y el resto respondiendo a compromisos que tuvo que hacer para ganar la elección, sobre todo con panistas voraces y solo dos que tres duartistas a los que logró incorporar en cargos de segundo y tercer nivel.
En un principio era la improvisación junto con la inercia de un estilo fideliano de gobernar en busca de un objetivo: el enriquecimiento a costa de lo que sea porque la oportunidad hay que aprovecharla.
Gente sin compromiso ni con quien les dio el nombramiento y mucho menos con los veracruzanos, improvisados que llegaron a los cargos por favores que nada tuvieron que ver con méritos, trayectorias y mucho menos cultura, provocó el desastre del que El Tío se ha regodeado seguro de que así su gobierno no ocupará el primer sitio en la historia política contemporánea de Veracruz como el peor que hemos tenido.
Pero poco a poco se han incorporado al gabinete del gobernador Javier Duarte, aunque sea en la recta final, personajes con prestigio y experiencia dentro de la función pública, que seguramente en los meses que restan lograrán medio enderezar la nave para entregar buenas cuentas, o cuando menos cuentas, a quien sea el sucesor.
La oportunidad que tuvo Javier Duarte de Ochoa para, por enésima ocasión, recomponer su equipo, la tuvo con la nominación de los candidatos del PRI y PVEM, pues cuando menos la mitad de los que van por curules ocupaban cargos de primer nivel en su gabinete.
De esta manera se incorpora, por ejemplo, Tomás Ruiz González, para ocupar la titularidad de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas. Tomás es un experto en administración financiera que arrancó precisamente este sexenio como secretario de Finanzas y Planeación y cuya capacidad y experiencia está nuevamente al servicio del gobierno de Javier Duarte, en condiciones distintas.
Otro que se incorporó por segunda ocasión al equipo cercano del gobernante es el politólogo Enrique Ampudia Mello, quien ya fue Subsecretario de Gobierno y quien, nos consta, es un operador político de primer nivel. Hoy funge como secretario Particular del Gobernador y su presencia al lado de él a leguas se ve que es necesaria. Ampudia es un político inteligente que conoce muy bien la conducta humana, sobre todo la de los políticos, cuenta con relaciones en el altiplano y sabe resolver asuntos delicados en el menor tiempo con resultados positivos, un buen cuadro sin duda.
Entró también el contador Ricardo García Guzmán, quien por segunda ocasión es Contralor General del Estado; la primera vez lo fue con el gobernador Miguel Alemán Velasco. García Guzmán es un político de amplia experiencia hoy convertido en el mago que pone todo su empeño en enderezar entuertos, los que dejaron los infieles niños corruptos, y que solo un experto podrá arreglar.
En la Coordinación General de Comunicación Social integró a un joven que no llegó a hacer política ni a aprovechar el cargo para acumular riqueza, a Juan Octavio Pavón González, exdirector de RTV, donde dejó huella indeleble de su trabajo, y cuyo único compromiso y lealtad es con quien lo puso, lo que le representa una gran ventaja porque solo de esa manera está logrando reorganizar esa importante dependencia que Fidel Herrera, a través de Alfredo Gándara, entregó repleta de compromisos absurdos con una multimillonaria deuda y donde se hacían los negocios más productivos al amparo de los medios de comunicación. El trabajo de reingeniería de Juan Octavio Pavón lo tendrá que agradecer el sucesor de Javier Duarte.
También en la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal, Pesca y Alimentación hubo ajustes con miras al cierre, entró el doctor Ramón Ferrari Pardiño merced a su experiencia en el ramo, pues ya fue, también con Miguel Alemán, titular de esa secretaría. El primer resultado lo ofreció con el ahorro de una renta millonaria que venía pagando la secretaría a un particular, luego de pasar las oficinas centrales a las instalaciones de lo que fue la Junta Local de Caminos. Resultados inmediatos.
A la secretaría de Educación llegó el político de Minatitlán Flavino Ríos Alvarado, también por segunda vez porque anteriormente ya ocupó ese cargo en el gobierno de Dante Delgado Rannauro, por lo que Fla llegó a un terreno que conoce pero, además, con el prestigio de ser un político profesional, de los que ya casi no quedan, y la ventaja de compartir responsabilidades con uno de los dos o tres duartistas químicamente puros, con Vicente Benítez González, el Oficial Mayor de la Secretaría, quien se encarga, desde su llegada al cargo, de limpiar en lo posible la secretaría de todos los vicios ancestrales que arrastraba.
Y, por último, el sexto secretario de Finanzas y Planeación, Antonio Gómez Pelegrín, de amplia experiencia en el ramo, quien lucha contra todos los intereses que ahí permanecen de fidelistas y gente poderosa que trata de mantener su coto de poder para continuar el saqueo, cuando ya no quedó nada.
Con ese equipo Javier Duarte de Ochoa bajará la cortina el día último de noviembre del año entrante para entregar a quien haya ganado la elección; un Yunes del PRI o del PAN o un tercero en discordia.
Trabajando juntos
Veracruz Puerto, por su propia complejidad en cuanto a tamaño territorial y población, es una tarea muy difícil en el ejercicio de gobernar. Eficacia, eficiencia, economía y legalidad son los elementos fundamentales para que una autoridad pueda gobernar una ciudad. Y más una ciudad como el puerto de Veracruz. Así, con esos factores de poder hoy por hoy administra, dirige y gobierna Ramón Poo su tierra natal.
Con una escuela y casta en donde los factores de la producción han forjado el patrimonio familiar a base de trabajo tenaz y fecundo, Poo hace del día a día por su paso en la alcaldía porteña una acción cercana y amena con la ciudadanía.
Una población, por cierto, cansada de ser tratada en el pasado con el desprecio y despecho que dan los tiempos que no son electorales; con Ramón Poo tiene a un ciudadano más atendiendo el despacho presidencial del municipio.
Por ello, el acercamiento ha permitido que Poo Gil haga acciones de gobierno en beneficio de todos los jarochos como la pavimentación en colonias olvidadas por años. “Trabajamos juntos” es el lema que da misión y espíritu de ser a la administración Poo. Y ante ello nada hará perder el rumbo al titular de la principal silla municipal de Veracruz: Ramón Poo Gil.
Leyendas urbanas
RAFAEL MORENO VALLE, gobernador del vecino estado de Puebla estuvo ayer en Xalapa, pero no vino a reunirse con su homólogo Javier Duarte como se supone mandan los cánones de la urbanidad política, no, vino a tomarse fotos con los candidatos veracruzanos de su partido, el PAN, dizque para apoyarlos. Una de dos o andan muy mal en cuanto a aceptación los panuchos de esta aldea o Moreno Valle hace precampaña para la presidencia en una actitud desesperada faltando a las reglas más elementales de la política y claro que es una falta de respeto a las autoridades constitucionales de Veracruz. Bonita chingadera todavía no llegan y ya se sienten dueños del país. ***** En opinión de EDGAR SPINOSO CARRERA, candidato de la alianza PRI-PVEM por el distrito siete de Martínez de la Torre, el mayor foro de un político se encuentra en la sierra de Misantla, con sus hombres y mujeres, “es aquí, en las comunidades, donde debemos de estar los políticos”. Desde muy temprana hora, el pasado sábado, Edgar Spinoso inició su recorrido de campaña en la sierra misanteca. Ahí caminó diferentes comunidades de la región, escuchó sus necesidades y propuso soluciones a sus inquietudes. En su campaña, Edgar Spinoso va a las comunidades para hablar de propuestas y dar soluciones pero, sobre todo, a escuchar a la gente. “Ya nadie nos para, esto ya va a la victoria el próximo 7 de junio, vamos muy bien pero vamos a seguir mejor y estamos acelerando el paso”, señaló el candidato que aprovecha cada minuto de su día en escuchar las inquietudes de la gente.
Reflexión
La muerte no perdona edades, posiciones económicas, preferencias, ideologías ni nada, se presenta de manera sorpresiva y se acabó. Se lamenta la de Sebastián Lerdo de Tejada, quien fungía como director del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE); falleció joven, a la edad de 48 años, en la plenitud de la vida y de su carrera política y productiva. Descanse en paz. Escríbanos a mrossete@nullyahoo.com.mx| formatosiete@nullgmail.com| www.formato7.com/columnistas