Contrario a lo que sus malquerientes especulaban y difundían, el gobernador Javier Duarte de Ochoa se despachó con la cuchara grande en la nominación de los próximos candidatos del PRI a la diputación federal por el principio de Mayoría Relativa.

El mandatario priista no sólo ha metido mano en la selección de los 17 abanderados del Revolucionario Institucional sino hasta en los del Partido Verde (PVEM) también, quien va aliado con el tricolor y postulará a militantes “prestados” en cuatro de los 21 distritos electorales de la entidad.

Este miércoles 18 tendrán lugar las Convenciones de Delegados del PRI para elegir por este método partidista a los candidatos del tricolor en nueve distritos electorales, entre los cuales destacan ex funcionarios duartistas que han sido encartados para sucederlo en el 2016: el ex secretario de Gobierno, Érick Lagos Hernández, quien contenderá por Acayucan; el ex coordinador de Comunicación Social, Alberto Silva Ramos, quien irá por Tuxpan, y el ex secretario de Educación, Adolfo Mota Hernández, el cual se la rifará por el de Xalapa Rural.

Todos ellos volverán a someterse a la prueba de las urnas el 7 de junio próximo, la cual ya aprobaron sin mayor problema en ocasiones anteriores: Mota en el proceso electoral federal de 2006 como diputado por Coatepec; Lagos en el legislativo local de 2007, y Silva en el municipal de 2010, cuando llegó a la alcaldía tuxpeña.

Sin embargo habrá que estar atentos a la designación de los candidatos priistas de Representación Proporcional, los cuales –aquellos que ocupen los primeros lugares de la lista plurinominal– tendrán virtualmente amarrada su curul en la siguiente Legislatura a la Cámara baja del Congreso de la Unión sin exponerse al riesgo del voto de castigo que pudiera hacer efectivo el electorado contra quienes contiendan representando al partido en el poder.

Y es que ha trascendido que la dirigencia del PRI propondrá a su Consejo Político Nacional la creación de una comisión especial con facultades para “palomear” la lista de candidatos a diputados federales plurinominales.

Los consejeros fueron convocados para sesionar este viernes 20 en la ciudad de México, con la finalidad de integrar la nueva instancia encargada de revisar los nombres de las cinco circunscripciones electorales. Veracruz pertenece a la tercera región nacional.

Por normatividad interna, el Comité Ejecutivo Nacional es el responsable de hacer las propuestas de candidatos a la Comisión Política Permanente del tricolor.

Sin embargo, en esta ocasión el nuevo organismo revisará el listado antes de turnarlo a los consejeros priistas.

La idea es que la Comisión Política pueda sesionar entre el 27 o 28 de febrero para avalar estas candidaturas de Representación Proporcional.

Según versiones atribuidas a la dirigencia nacional del PRI encabezada por César Camacho, la intención es llevar la decisión hasta el límite legal, pues buena parte de los seleccionados deberán presentar su renuncia a diversos cargos en el gobierno federal.

¿Qué funcionarios de origen veracruzano dejarán sus cargos en el gabinete del presidente Enrique Peña Nieto para irse al Palacio Legislativo de San Lázaro? ¿Habrá que considerarlos también para la sucesión estatal de 2016?

Por lo mientras ha llamado la atención que el gobernador Javier Duarte declarara una semana antes de la visita de Peña Nieto a la región de Los Tuxtlas, que “yo no tengo candidato para sucederme para la gubernatura del estado de Veracruz”, reiterando que el aspirante “que esté mejor posicionado es a quien apoyaré”.

Según lo que ha comentado, esta advertencia la habría hecho el mandatario estatal a los miembros de su gabinete que aspiran a sucederlo y que a principios de enero de este año renunciaron a sus cargos para ser postulados por el PRI para las próximas elecciones federales, a los cuales habría puntualizado que en la designación de su sucesor incidirá no sólo el nivel de su posicionamiento, sino que además del dominio popular que llegaran a tener, la decisión final sería del presidente Enrique Peña Nieto, líder moral del partido político en el poder.

Duarte de Ochoa habría dicho que ciertamente entre los priistas que aspiran por la gubernatura se mencionan a algunos de sus excolaboradores, pero no dejó de reconocer que los senadores Pepe Yunes Zorrilla y Héctor Yunes Landa son los que por el momento tienen grandes posibilidades.

¿Por qué contra lo que habían venido rumorando sus enemigos y hasta sus propios correligionarios, el Jefe del Ejecutivo del estado muy prudentemente se ha autoexcluido en la designación de su sucesor? ¿Acaso la pertinente declaración de Duarte de Ochoa se habrá derivado también del encuentro privado que sostuvo con el senador Yunes Landa en Casa Veracruz, la cual se realizó a principios de este mes, siete días antes de que Yolanda Gutiérrez Carlín, comadre del aspirante a gobernador, asumiera la Secretaría de Protección Civil del estado, mismo cargo que 23 días antes había rechazado públicamente el legislador para su otro aliado, “mi compadre, mi amigo, mi hermano”, Jorge Moreno Salinas?

Lo único cierto, hasta hoy, es que la carrera sucesoria en Veracruz aún no está totalmente definida en el PRI. Todavía falta un año para elegir al candidato. ¿Habrá algún peñista “tapado” en la próxima lista plurinominal de nominados a la diputación federal? Muy pronto habrá de saberse.