Nunca, que se recuerde, Veracruz había tenido una Legislatura local con tantos diputados de muy bajo nivel político y académico como la actual.
Y es que en esta camada de legisladores no solamente hay un representante de un partido estatal de reciente creación que el sexenio pasado estuvo internado en un reclusorio de Monterrey, Nuevo León, procesado por fraude contra una empresa de origen asiática, sino que también se colaron otros por el PRI, como el diputado por Boca del Río, Raúl Zarrabal Ferat, quien es señalado como presunto responsable de los desvíos millonarios y otras irregularidades administrativas más detectadas durante su gestión como secretario de Comunicaciones, las cuales han sido denunciadas desde noviembre de 2013 por el titular de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP), Gerardo Buganza Salmerón, y consignadas en los dictámenes que el Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) ha reportado directamente a la Comisión de Vigilancia del Congreso.
Sin embargo, un caso peculiar es el del diputado local por el trigésimo distrito electoral con cabecera en Coatzacoalcos, Renato Tronco Gómez, quien ha sido dos veces presidente municipal de Las Choapas –la primera vez por el PAN, en el trienio 2005-2007, y luego por el PRI, en 2011-2013– y ahora, también por segunda vez, forma parte de la bancada del partido tricolor en el Congreso local, aunque en esta ocasión fue postulado por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), aliado del Revolucionario Institucional en la elección local de julio del año pasado.
Pero, lamentablemente, toda esa experiencia legislativa y en la administración pública municipal que Tronco Gómez ha acumulado en estos últimos nueve años está por desaprovecharse ya que, ¡después de 12 inasistencias!, el diputado local del partido del tucán anunció que sí solicitará licencia para separarse de su cargo “porque no hay condiciones” para continuar en su curul del Palacio Legislativo de Xalapa.
Eso sí, entrevistado este martes a su llegada al salón de sesiones, el polémico legislador sureño dijo que sus 12 inasistencias están justificadas, por lo que ese mismo día pasaría a recoger los dos meses de su dieta que aún no cobraba.
El legislador nativo de Cerro Pelón, municipio de Las Choapas, no quiso especificar a qué se refería con que “no hay condiciones” para que siga como diputado local, y sólo se limitó a reiterar que momentáneamente se retira de la vida política para dedicarle más tiempo a sus actividades personales.
¡Qué lástima que el Congreso veracruzano pierda a un político muy honorable, con ideas brillantes y propuestas legislativas tan avanzadas! Además, la bancada priista y sus aliados estarían por perder al mejor de sus tribunos para debatir y enfrentar con argumentos muy sólidos a los más fieros representantes de la oposición de izquierda y derecha que no pierden oportunidad para cuestionar las acciones de gobierno e iniciativas turnadas por el titular del Poder Ejecutivo.
¡Oh! ¿Y ahora quién le va a dar clases al maestro Juan Nicolás Callejas Arroyo, líder de la diputación priista y presidente de la Junta de Coordinación Política, sobre lo que significa “armonizar” una ley local con la federal para evitar que el Presidente de la República vuelva a amagar con interponer ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación una controversia constitucional como recientemente ocurrió en el caso de la reforma educativa?
Por favor, ¡no permitan que abandone su curul el diputado Tronco! Si es necesario, ya que no avalaron que impusiera a su hermano Miguel Ángel en la presidencia municipal de Las Choapas, al menos dejen que “El Trompudo” entre con todo y caballo al recinto parlamentario y patrocínenle su sueño de grabar un disco con canciones de Joan Sebastian.
¿Acaso será mucho pedir? Ya no lo hagan por ustedes, sino por Veracruz que tanto lo necesita.
PROCURADOR AHUMADO
Este lunes 19, el procurador estatal de Protección al Medio Ambiente, Dalos Ulises Rodríguez Vargas, se fue a tomar la foto al basurero a cielo abierto que desde hace meses venía funcionando en Chichicaxtle, municipio de Puente Nacional.
Rodríguez Vargas lo declaró formalmente “clausurado”. Pero de no haber sido por el incendio que inició el pasado fin de semana y que durante tres días provocó una espesa humareda que afectó la visibilidad de los miles de automovilistas que transitan por ese tramo de la autopista Xalapa-Tamarindo-Cardel, seguramente el tiradero seguiría abierto y representando un grave foco de infección.
Lo que no ha informado todavía el funcionario estatal es si ya deslindó responsabilidades y aplicó las sanciones previstas por la ley contra las autoridades municipales negligentes que conocieron y encubrieron esta acción contaminante.