En más de un sentido, la cultura en Xalapa es un proceso de tres épocas caracterizadas por tres estilos de filiación cultural, la historia de una obra y de los autores de esas obras, pero también, la del puente entre estos y su medio social y político.

1. En la década de los veinte, los nuevos actores urbanos manifestaron su clamor queriendo participar en el cambio, preconizado por las ideas socialistas y anarquistas, y una clase media llegada desde muchos municipios veracruzanos y de otros estados a formarse en la Escuela Normal Veracruzana; los escritores se comprometieron con la lucha social así como los pintores, los escultores y los músicos se ocuparon de inaugurar la nueva vida artística xalapeña de grupos y ligas revolucionarias reunidos en cafés para difundir sus ideas en revistas y periódicos: se fundaron las revistas Horizonte, órgano de difusión de las ideas estridentistas, dirigida por Maples Arce, y Ruta, de los cultivadores de la literatura social con José Mancisidor como líder.

Xalapa fue la sede de la única vanguardia del país con el desarrollo del estridentismo entre 1921 y 1927, gracias al apoyo del gobernador Heriberto Jara Corona a los escritores Arqueles Vela, Germán List Arzubide y Manuel Maples Arce.

En 1929 se funda la primera Orquesta Sinfónica financiada por el gobierno de un estado: la Orquesta Sinfónica de Xalapa, a la sazón una de las pioneras de la República Mexicana.

En los años treinta se invierte en arte público como las esculturas de las cuatro virtudes cardinales de Enrique Guerra, los murales de la nueva sede de la Escuela Normal firmados por el artista José Chávez Morado, y el mausoleo a los agraristas en forma de pirámide trunca construida en la cima del cerro Macuiltépetl.

2. De 1944 a 1968 se gestó y resplandeció la generación fundacional, la del medio siglo xalapeño o generación de la Universidad Veracruzana, cuyos fundamentos intelectuales fueron buscar la pluralidad. Así, no se dejan influenciar por los postulados revolucionarios del centro de la república y prefieren el cosmopolitismo como estrategia para confrontar lo propio y lo universal, a tal punto que sus miembros se afanaron en vincular a Xalapa con el quehacer cultural y literario de otros países.

En menos de 30 años, la Universidad Veracruzana consolidó unas de las más importantes instituciones culturales a nivel nacional con sede en esta capital que, hasta hoy, encausan la vida artística y cultural: las organizaciones musicales, los institutos de investigación, la escuela de bellas artes, el departamento editorial, las revistas, las producciones artísticas, los grandes eventos, la infraestructura cultural atestiguan la relevancia de esta universidad.

3. Entre 1968 y 1981 ocurre el gran cambio en las políticas culturales y educativas de nuestra ciudad. Observamos ya un incremento en los presupuestos para el fomento de las humanidades, las artes, la ciencia y por supuesto es una gran etapa donde el aparato e infraestructura para la cultura se amplía, así como los públicos, los lectores y el estudiantado, y se promueve la formación intelectual de la población. La cultura nacional inicia también su descentralización y reconoce los procesos regionales en la construcción de su cultura e identidades propias, se aminoran las distancias culturales entre la capital y las ciudades. Parte del mérito de este proceso se debe al crecimiento de las universidades estatales, como las de Guadalajara, Guanajuato y Veracruzana.

Los años setenta fue una gran temporada para la proyección de los nuevos grupos artísticos como Orbis Tertius –formado en 1975–, y el ballet Folklórico de Miguel Vélez Arceo, entre otros, y sobre todo, para la nueva pujante generación de artistas plásticos como Pepe Maya, Fernando Vilchis, Leticia Tarragó, Adrián Mendieta, Rafael Villar, Pablo Platas, Guillermo Barclay, Mayra Landau. Todos ellos beneficiarios del esfuerzo de Carlos Jurado, fundador del Instituto de Artes Plásticas, donde también tuvieron éxito los magníficos esfuerzos por la difusión del cine mundial del ilustre maestro Lorenzo Arduengo Pineda que en ello traería camino andado y compañeros de viaje desde 1959.

En 1973 se consolidó la unidad interdisciplinaria de actividades estéticas y creación artística, los talleres libres de arte, después de ver naufragar la efímera galería independiente Libertad, esfuerzo de varios artistas xalapeños.

(Continuará)