Washington, 7 feb (Xinhua) — Un auto deportivo rojo Tesla se dirige ahora hacia una órbita adyacente de Marte a bordo del cohete en operación más poderoso del mundo, el Falcon Heavy, lanzado el martes.

El Falcon Heavy despegó a las 15:45 hora del este (21:45 GMT) desde el Centro Espacial Kennedy, desde donde la agencia espacial estadounidense NASA lanzó un cohete que llevó astronautas a la Luna en 1969.

Los dos dos propulsores del cohete aterrizaron de manera simultánea en tierra ocho minutos después del despegue y provocaron entusiastas muestras de júbilo y ovaciones entre los cerca de 10.000 espectadores en el lugar.

El Falcon Heavy de SpaceX consiste esencialmente en tres de los 9 cohetes Falcon de la compañía ensamblados juntos. Con un total de 27 motores Merlin, es capaz de generar «más de 5 millones de libras (2,3 millones de kilogramos) de empuje en el despegue, equivalente a alrededor de 18 aviones 747» de acuerdo con SpaceX.

Elon Musk, fundador de SpaceX y Tesla, dijo en una conferencia de prensa después del lanzamiento que parecía «tan ridículo e imposible, y pueden decir que es real porque parece tan falso».

Musk publicó en un tuit una imagen del conductor falso que fue instalado en el asiento del auto rojo y que parecía ver hacia el planeta azul desde el cual partió para siempre.

Frente a él una pantalla tenía escrito «Don’t Panic» (no entre en pánico). En el tablero del auto se podía leer «Hecho en la Tierra por Humanos».

De acuerdo con Musk, dentro de unos meses el auto llegará a unos 400 millones de kilómetros distancia de la Tierra si todo sale como está planeado y avanzará a una velocidad de 11 kilómetros por segundo.

«La misión salió tan bien como podría esperarse», dijo Musk. «Se trata de lo más emocionante que jamás haya visto», indicó, aunque mencionó que el núcleo central del cohete no cayó en el barco no tripulado en el Atlántico como estaba planeado y lo hizo sobre las aguas cercanas.

Antes del lanzamiento, Musk había minimizado las expectativas del lanzamiento y dicho que la misión podría terminar en una «exhibición de fuegos artificiales».

El lanzamiento del Falcon Heavy es un gran avance en la industria de cohetes de carga pesada. Puede transportar 64 toneladas de productos hacia la órbita, el doble de la capacidad del vehículo en operación que más se le acerca, el Delta IV Heavy, a un tercio del coste, señaló la compañía.

Sólo el cohete lunar Saturn V, que voló por última vez en 1973, puso en órbita una carga mayor.

«Un Falcon Heavy en operación convertirá a SpaceX en la orgullosa propietaria del sistema de cohetes más poderoso desde el Saturn V, y además abre otra posición de la industria de lanzamientos para una competencia seria», dijo Jason Davis de la Sociedad Planetaria, la mayor organización no lucrativa de Estados Unidos que promueve la exploración espacial.

La NASA y compañías privadas de Estados Unidos, incluida Blue Origin, del fundador de Amazon Jeff Bezos, también están desarrollando  sus propios cohetes de carga pesada, pero el enorme cohete económico de Musk lleva ahora la delantera.

Además, se cree que el primer viaje del cohete acercará aún más la exploración del espacio profundo.

«El Falcon Heavy es definitivamente capaz de enviar vehículos tripulados alrededor de la Luna», dijo Musk, lo que sugiere que una versión mejorada del cohete será «ideal para la colonización interplanetaria y para establecer una gran base sobre la Luna y una ciudad en Marte».

El Falcon Heavy es un «preludio» y «va a enseñarnos mucho acerca de lo que es necesario para tener un propulsor enorme con una cantidad demencial de motores», dijo el multimillonario de la tecnología.