Río Janeiro, 28 ene (Xinhua) — Ante la posibilidad cada vez más real de quedar aislado de la sucesión presidencial, el presidente de Brasil, Michel Temer, ha decidido realizar un gesto público hacia los principales actores de su bloque político para tratar de recuperar influencia en la construcción de alianzas para las elecciones generales de octubre.

En los últimos días, la Presidencia brasileña dio señales de reaproximación con el gobernador del estado de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, mientras que le puso restricciones a una posible candidatura del ministro de Hacienda, Henrique Meirelles

La prensa brasileña apuntó esta semana que la idea original de Temer y de sus asesores era organizar una coalición única de los partidos que participan de la alianza del gobierno, y que haga frente a la derecha que lidera Jair Bolsonaro y a la izquierda, que mantiene la duda sobre la candidatura del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, condenado esta semana en segunda instancia, pero que lidera todas las encuestas de voto.

Este grupo de los partidos aliados lanzaría un candidato para defender la gestión del presidente y disputar con el gobernador de Sao Paulo el electorado más de centro.

Los principales ministros de Temer estaban incómodos, desde fines del año pasado, con el hecho de que Alckmin había acelerado las negociaciones con parte de los partidos de forma aislada, minando la unidad del bloque.

De esta manera, para retomar protagonismo, el presidente, en una entrevista con el diario «O Estado de S. Paulo» esta semana, minimizó la expectativa de que Meirelles pueda llegar a disputar la presidencia con el apoyo del bloque de gobierno.

«Sería un gran presidente, pero, para mí, está claro que es mucho mejor que se quede en el ministerio», dijo.

Con las recientes declaraciones, Temer trató de mostrar que todavía es un actor importante para el armado de la alianza, en sus últimos meses en la presidencia brasileña. El guiño a Alckmin indica que el presidente podría ayudar al gobernador en la construcción de acuerdos con los partidos de su base, claves para la estabilidad de un futuro gobierno.