A 557 días del obligado se acabó y la inevitable despedida. El cambio más notorio, es que la situación empeora.

Veracruz padece los efectos de una crisis económica en aumento, que a su vez  se agudiza, por políticas oficiales equivocadas o insuficientes; y por la influencia de los contextos nacional e internacional.

Según el INEGI, casi 69% de la población ocupada está en la informalidad, o sea  7 de cada 10 veracruzanos trabajan sin prestaciones, sobreviven por su cuenta y sin empleo formal.

Efectos de una Economía en recesión o estancada. Consecuencia de Finanzas Públicas en la opacidad y quebradas. Y de que no se atiende bien y oportunamente lo importante. Siguen efectos adversos de la inflación y la devaluación. Aumentan hambre y pobreza, inseguridad y violencia.  Para los veracruzanos, más desastres y desgracias, limitaciones y sacrificios.

En cuanto a la anunciada reestructuración de la deuda bancaria y de valores del gobierno estatal, se reciben malas calificaciones  de las calificadoras; y, otro fatal aviso, se incrementan las tasas de interés interbancario a 6.75% y pueden seguir creciendo. Pésima recomendación de los expertos financieros y encargados oficiales: gastar más y endeudar más, no es la solución.

Avanza la destrucción institucional, y los  ejemplos sobran; baste recordar el caso pendiente del hundo Instituto de Pensiones del Estado; y de la misma Universidad Veracruzana, que padece la peor situación financiera de su historia.

Ayuntamientos en crisiso.¿Crímenes sin castigo?

A solo 222 días, poco más de 7 meses del final municipal, es obligado llamar la atención, en el hecho de que como todo lo afectado por ineficiencia, corrupción y delincuencia, hasta hoy, es notorio que no hay  intención firme, ni decisión política real,  a pesar de la creciente presión, de realizar una estricta evaluación con amplia e intensa participación social.

Todo servidor público, todo Ayuntamiento, tiene la obligación de cumplir y hacer cumplir la ley,  tanto en todo lo hecho y lo que se dejó de hacer, como  en lo bien o mal hecho.

Es imprescindible valorar, hacerlo para identificar logros y avances, si los hay; y también para señalar errores y pérdidas, que sin duda se han dado. Separar unos de otros es vital, ya que se debe defender y alentar el buen trabajo; y denunciar y castigar a ineptos y corruptos.

Evaluar incluso, para participar y votar fundadamente, en la elección correspondiente. Y no dejarse llevar por el circo electoral de promesas y compromisos infundados, de ocurrencias y manipulaciones que hacen realidad la continuidad de la impunidad, de presuntos responsables y prófugos potenciales dentro del ámbito de gobierno municipal.

¿Cuántos de los 212 Ayuntamientos, se han hecho ganadores de reconocimiento o denuncia, de estímulo o castigo? ¿Cuántos son “huachicoleros” del presupuesto, concesiones, permisos, derechos, fondos subsidios y  patrimonio municipal? ¿Y los servicios públicos privatizados, a cambio de qué?

Morena sigue adelante

En estos días, sobresale un hecho político y social significativo, que se debe señalar y comentar.

Por un lado,  la organización y movilización ciudadana y social, sus inconformidades y protestas siguen creciendo.  Y por el otro,  MORENA acapara el liderazgo y la confianza popular.

Bien se sabe, en el PRIANRD, quienes son los autores, responsables y culpables del desastre en el que se vive tanto a nivel nacional, como estatal y municipal. Querían y quieren gobernar y ahí están sus resultados: el poder, para no poder y aprovecharse de él.

Así que, no hay que darle vueltas, a la responsabilidad contraída y no cumplida en los últimos años y décadas, se suma con frecuencia la culpabilidad probada por el uso y abuso de recursos públicos e instituciones oficiales, por muchos de los que han estado y están al frente de los gobiernos. Los culpables son los ineptos y corruptos que se encubren y protegen, en un notorio sistema de continuidad de complicidad e impunidad.

Lo esperanzador, es que hoy en día, hay más elementos para canalizar esa energía renovadora de la participación popular, que empieza por señalar la ineludible responsabilidad, de quienes   gozan o gozaron del cargo público; y también,  con toda razón y derecho,  muchos terminan por identificar e  identificarse, con la organización y el líder, que se considera una esperanza, o constituye la mejor oportunidad disponible.

Ante esta realidad se puede o no estar de acuerdo, pero es un hecho inobjetable  que MORENA crece y se fortalece, con más y más identificación y apoyo popular.

*AcademicoIIESESUV@nullRafaelAriasH.Facebook:VeracruzHoydeRafaelAriasH