La diputada local con licencia, Eva Cadena Sandoval, fue pillada una vez más al recibir dinero de dudosa procedencia.

El caso de la legisladora de Morena, distrito XXX, de Coatzacoalcos II, se convirtió en un escándalo nacional; a la fecha, diferentes medios informativos han dado cuenta de tres videos; en los dos primeros se consigna la entrega, por parte de personas desconocidas, de 500 y 750 mil pesos; en el tercer material audiovisual aparece Eva Cadena recibiendo un millón de pesos de supuestos empresarios que así le habrían pagado su apoyo para impulsar una ley en el Congreso local.

El tema ha escalado no sólo en la Legislatura del Estado, sino también en las instancias de procuración de justicia. La diputada se encuentra, hoy más que nunca, en el ojo de un huracán político y judicial: fue separada de su partido, que terminó por darle la espalda; no pudo regresar al Poder Legislativo, por lo que no goza de la figura del fuero; es objeto de la crítica y el escarnio público y bautizada como “la recaudadora”; y por si fuera poco, la Fepade, la PGR y hasta la fiscalía estatal le investigan por los hechos que se evidenciaron en los citados videos.

Este martes, en una acalorada sesión en la legislatura local, Eva Cadena fue tema del debate entre los diputados; uno de ellos se aventó la puntada de señalar que Morena se había transformado en Movimiento de Recaudación Nacional, en alusión a la práctica en que incurrió la diputada en desgracia. En esa misma sesión se notificó la también ex candidata a la presidencia municipal de Las Choapas no regresaría a su curul. Un día después, el miércoles, como para controlar el daño, los diputados locales de Morena acudieron a la Fiscalía General del Estado para denunciar a la ex integrante de dicha bancada. Se espera que como consecuencia de esa denuncia, la instancia que tiene a cargo a Jorge Winckler proceda a la solicitud de desafuero.

No es todo, este miércoles trascendió que la Procuraduría General de la República inició una investigación contra Cadena Sandoval por lavado de dinero y por operaciones con recursos de procedencia ilícita.

¿Quién entregó el millón?

El tercer video, en el que aparece la legisladora por el distrito XXX recibiendo un millón de pesos, fue tema también en el debate legislativo local, dado que pone en duda la honestidad del trabajo legislativo de Eva Cadena y, de paso, afecta la imagen de su partido, cuyos integrantes buscan un rápido deslinde.

La dimensión del daño que ocasionaron esos videos a Morena, en el contexto de la elección en los estados de México, Coahuila, Nayarit y Veracruz, es sumamente alta; a estas alturas, los videos de difundió El Universal se convirtieron en virales.

Ese ha sido, hasta hoy, uno de los argumentos más sólidos contra el partido de Andrés Manuel López Obrador, porque el caso de Eva Cadena echa por la borda los discursos de un partido que ha hecho del combate a la corrupción su principal bandera.

La inevitable pregunta en torno al caso, se refiere a la identidad de los supuestos empresarios que sobornaron a la diputada con el millón de pesos; sobre ese punto comenzaron las especulaciones en los pasillos del recinto legislativo; hay quien afirma que una línea de la investigación podría relacionarse con los verificentros, debido a que Eva Cadena estuvo involucrada en un dictamen relacionado con esas empresas; la otra tendría que ver con el tema de los gallos de pelea, una iniciativa que fue bloqueada por la bancada de Morena a instancia de la legisladora originaria de Las Choapas.

Intento de cobro por voto en el legislativo

Sobre este último punto, hablamos con Efraín Rábago Echegoyen, presidente de la Comisión Mexicana de Promoción Gallística, que lucha contra la prohibición de las peleas de gallos en Veracruz; señala que no hubo tal soborno, sino un intento, una insinuación por parte de un abogado cercano a Cadena Sandoval.

Narra que la diputada le citó en Chalco, Estado de México, y al comenzar la reunión dijo que tenía otro compromiso, por lo que dejó al promotor de las aves de combate en compañía de un abogado que trabajaba para ella; en la conversación, el representante de Cadena Sandoval explicó que el apoyo a la causa de los galleros implicaría un pago por supuestos “gastos”. Enseguida, Efraín Rábago abandonó el lugar. “Nosotros no nos prestamos a eso; no damos sobornos ni dádivas”, dijo para luego retirarse. Por supuesto, la petición de los galleros no prosperó ante el bloqueo de Morena.

El punto no es a quién asiste la razón, si a los promotores o a los críticos de las peleas de gallos, sino la forma de operar de legisladores que subastan su voto al mejor postor.

Al final, los galleros veracruzanos, al igual que los diputados de Morena, se deslindaron de Eva Cadena, quien terminó por convertirse en un factor de desprestigio político y social.

Lo interesante, en el seguimiento de las investigaciones que habrán de realizar las autoridades ministeriales en torno al caso, no será sólo el impacto que registrará Morena por el actuar de Cadena Sandoval, sino la identidad de quienes sí entregaron los recursos.

En total, los presuntos actos de corrupción que exhibieron a la hoy ex diputada ascienden a más de dos millones de pesos; sin embargo, el monto de lo que corre, por debajo de la mesa, en las campañas políticas, considerando a tod