Mientras el alcalde xalapeño Américo Zúñiga Martínez acude a (y participa en) reuniones y recorridos orientados a atraer recursos o generar la participación para resolver los aspectos problemáticos del municipio capitalino, llama la atención que algunos de sus colaboradores prefieran disfrutar la calma de sus oficinas o el deleite de la golfería.

            La semana pasada comentamos en este espacio la extraordinaria iniciativa de la Asociación de Hoteles y Moteles de Xalapa, suscrita con un entusiasmo nunca visto, para crear e impulsar la marca Xalapa La Región, en alianza con un total de 14 municipios que, por separado, difícilmente podrían encarar una promoción turística que les reditúe flujos importantes y duraderos de paseantes nacionales.

            La estrella de la alianza estratégica es, por supuesto, el municipio de Xalapa, el más desarrollado urbanísticamente y con una sólida oferta cultural y artística, además de ser centro logístico en materia de hospedaje y transporte.

A las reuniones, que se han realizado en diversos puntos de la región, han acudido los directores municipales de Turismo e, incluso, algunos alcaldes. El propio secretario de Turismo y Cultura del gobierno estatal, Harry Grappa, participó en una de ellas, lo que da relieve a la importancia que puede tener la iniciativa conjunta de empresarios y autoridades municipales.

Pero el que no se ha aparecido ni siquiera para tomar café, comer una pieza de pan o degustar el desayuno es el director de Turismo Municipal ¡de Xalapa!, Francisco Barquin Gornés, pese a que ha sido reiteradamente invitado. Para colmo, se ha dedicado a bombardear la iniciativa, a cuestionar a los hoteleros sobre las cifras que manejan sobre ocupación hotelera y se ha defendido con el garlito de que el ayuntamiento ha realizado una fuerte promoción turística.

La actitud de quien fuera delegado federal de Turismo en la entidad en la primera mitad de los años noventa, luego de fungir como subdirector de Turismo del gobierno estatal, es más contestataria que propositiva.

Debiera aprender del alcalde Américo Zúñiga quien, en el reciente proceso de consulta popular, se abrió al análisis, la crítica y las proposiciones de diversos representantes de la ciudadanía, grupos empresariales y académicos sobre el futuro de la promoción turística de Xalapa, y establecer relaciones de colaboración con los municipios circundantes.

 

¿Qué proponen hoteleros y qué debe hacer Barquin?

 

Según la Asociación de Hoteles y Moteles de Xalapa, la ocupación hotelera promedio anual en la ciudad es del 60 por ciento. A nuestra ciudad arriban cada año poco más de 940 mil turistas nacionales y apenas poco más de 30 mil turistas extranjeros, con una pernocta promedio de 1.4 días. Los meses con más alta ocupación son junio, julio, agosto, octubre (el más alto) y noviembre.

            Para potenciar estos datos, los hoteleros proponen crear un clúster turístico, unificar la marca Xalapa La Región, fortalecer un consejo regional de directores municipales de turismo, impulsar la promoción conjunta y crear una cooperativa de transportación turística.

             No crea que están esperando a que les den permiso. Por el momento tiene un avance del 60 por ciento un motor de reservaciones hoteleras en que se incluyen todos los prestadores turísticos de los 14 municipios, lanzarán un portal en internet con información turística de la región con datos sobre las celebraciones y atractivos turísticos según la fecha, impulsarán sus redes sociales, ofrecerán imágenes de los hoteles y áreas turísticas videograbadas mediante un dron, mapa y manteles interactivos y escenas en 360 grados.

            Hace muchos años que instituciones como la Universidad Veracruzana han buscado alianzas con los empresarios de este sector para impulsar festivales como Junio Musical (desaparecido), la Feria Internacional del Libro y, más recientemente, el Hay Festival. Quienes dirigían la asociación, por desgracia, no mostraron interés y, acaso, no comprendieron los alcances de la propuesta y solo vieron un gasto.

            Hoy lo dirige un joven empresario xalapeño, Reynaldo Quirarte Mora, quien podría comunicarse a la perfección con el joven alcalde, aunque es posible que tenga dificultad para ser entendido por un ya viejo Tito Barquin, originario además del Puerto de Veracruz y no de Xalapa.

            El discurso de Barquin en los medios ha sido de confrontación, de cuestionamiento, de aclaración, de justificación, de manejo de cifras con que busca acerar sus aseveraciones, cuando podría aprovechar la dinámica empresarial para fortalecer la labor que le fue encargada por Américo Zúñiga Martínez.

            Y reunirse con el secretario de Turismo y con autoridades de la Universidad Veracruzana para fortalecer una alianza estratégica con los restantes 13 municipios, con el propósito de crear las condiciones que en el mediano plazo coloquen a la región en un sólido generador de divisas vía turismo para el estado, con lo que se podría elevar la calidad de vida de quienes habitamos este rincón veracruzano.

 

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